Tal y como si se tratase de un elaborado guión para una película de ciencia ficción, la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio, NASA se dispone a desviar el curso de un asteroide que pondría en peligro al planeta Tierra.
Bajo la misión llamada DART la NASA busca estudiar una nueva tecnología que le permita desviar asteroides que amenacen con impactar con la Tierra. Básicamente se trata de un impacto cinético que no es más que un choque deliberado contra el asteroide.
In 2022, our DART mission will test a new asteroid deflection technology. The target — a small moonlet posing no threat to Earth — is now named “Dimorphos,” reflecting its status as the 1st celestial body to have the form of its orbit changed by humanity: https://t.co/DhPz9xjFZi pic.twitter.com/10WoWpzQwv
— NASA (@NASA) June 23, 2020
“Tras el descubrimiento, los asteroides obtienen un nombre temporal hasta que conocemos sus órbitas lo suficientemente bien como para saber que no se perderán. Una vez que el sistema Didymos fue identificado como el objetivo ideal para la misión DART, tuvimos que distinguir formalmente entre el cuerpo principal y el satélite”, explicó Andy Rivkin, astrónomo investigador y codirector de investigación DART en el Laboratorio de Física Aplicada de Johns Hopkins ( APL), quien construye y administra la misión para la NASA.
El lanzamiento de la misión será en el 2022, y ya tiene su primer objetivo. Se trata del asteroide “Dimorphos”, una pequeña Luna, que aunque no representa un peligro latente servirá para ser objeto de estudio.
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“Dimorphos significa “dos formas”, así refleja el estado de este asteroide como el primer cuerpo celeste en contar con la forma de su órbita cambiada significativamente por la tecnología humana, este sería el caso tras el impacto de DART”, explicó Kleomenis Tsiganis, científico planetario de la Universidad Aristóteles de Salónica y miembro del equipo de DART.
Una vez implementada la misión, la NASA estudiará por dos años el comportamiento del asteroide.