¿Drácula era real? Museo revela la ciencia tras los monstruos del cine

En el marco de Halloween, el Museo de Historia Natural de Los Ángeles presenta una exposición sobre los mitos y verdades que rodean a los clásicos personajes del terror hollywoodense.

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Fachada del Museo de Historia Natural de Los Ángeles, California. Foto EDH / AFP

Por Agencia EFE

2019-10-30 9:30:46

¿Drácula era real o solo un mito alentado por las enfermedades infecciosas? ¿Qué papel jugó la fiebre por el antiguo Egipto para inspirar el miedo a La Momia? ¿Y qué tiene que ver Frankenstein con los singulares experimentos de un científico llamado Luigi Galvani?

A estas preguntas, entre la realidad y lo fantasioso, responde “Natural History of Horror”, una nueva exposición del Museo de Historia Natural de Los Ángeles (NHM) que indaga en los monstruos clásicos del cine de terror de Universal Pictures, y explora los experimentos científicos y los hallazgos históricos que les dieron pie

“Estamos en Los Ángeles, en el centro de Hollywood (…), y estos monstruos clásicos fueron inspirados por la ciencia y la naturaleza. Así que queremos usar nuestras colecciones para visitar esas historias”, explicó a Efe Daniel Caballero, educador del NHM.

La muestra tiene todos sus contenidos en inglés y en español. Incluye actos paralelos como proyecciones de obras maestras del terror de Universal y presenta objetos que se emplearon en los rodajes de aquellos filmes de culto.

Aquí te compartimos cómo explica dicha muestra el origen de los monstruos del cine:

DRÁCULA: SANGRE MALIGNA

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Pocas figuras del género de terror han tenido más recorrido que el famoso Drácula. Desde “Dracula” (1931) de Tod Browning y con el inolvidable Bela Lugosi como protagonista, el cine ha recurrido una y otra vez al mito del misterioso, seductor y emblemático chupasangre nocturno, que popularizó la novela homónima del escritor irlandés Bram Stoker.

Vlad el Empalador, un temible príncipe de Rumanía en el siglo XV, inspiró a Stoker para crear al conde Drácula, aunque la exposición del NHM apunta a otro motivo para el éxito de este personaje: las enfermedades infecciosas como la tuberculosis o el cólera que causaron incontables muertes en el siglo XIX y que alarmaron a la población sobre los males que podían transmitirse por la sangre.

LA MOMIA: PASIÓN Y MALDICIÓN DEL ANTIGUO EGIPTO

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Pirámides descomunales, jeroglíficos incomprensibles, momias para la eternidad… ¿A quién no le fascinan o inquietan los misterios del antiguo Egipto? “The Mummy” (1932) del realizador Karl Freund, con el imprescindible actor Boris Karloff al frente, fue la primera película en explotar al máximo el potencial del antiguo Egipto en el terror, pero su premisa estaba conectada con la actualidad. Diez años antes de la película, el mundo se maravilló ante el descubrimiento de la tumba del faraón Tutankamón en 1922 que realizó Howard Carter, llena de tesoros e intacta tras miles de años. Pero la pasión dio paso a la supuesta maldición: Lord Carnarvon, que financió la expedición, murió en 1923 en extrañas circunstancias y fue fácil conectarlo con una presunta venganza del faraón desde el más allá.

FRANKENSTEIN: ELECTRICIDAD PARA VOLVER A LA VIDA

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Antes de proseguir hay que aclarar algunos detalles sobre la historia de este personaje. Primer error: Frankenstein no es el monstruo creado a partir de cadáveres, sino por el doctor que le da la vida. Segunda aclaración: la cinta “Frankenstein” (1931) de James Whale, protagonizada por Boris Karloff —que adaptaba la famosa novela “Frankenstein or The Modern Prometheus” de Mary Shelley—, no es pura invención sino que se inspira en unos experimentos científicos del siglo XVIII. El italiano Luigi Galvani era un científico que investigaba los efectos y la presencia de la electricidad en los cuerpos de los animales. Uno de sus experimentos más recordados es en el que aplicó electricidad a una rana muerta, cuyas patas se contrajeron por un instante como si estuviera viva de nuevo. De ahí a “Frankenstein” solo había que echarle un poco de imaginación.

LA CRIATURA DEL LAGO: ¿EL ESLABÓN PERDIDO?

Foto EDH / Universal Pictures

Reinterpretado recientemente por el director mexicano Guillermo del Toro en “The Shape of Water” (2017), el monstruo de la película “Creature from the Black Lagoon” (1954), dirigida por el estadounidense Jack Arnold, quizá no sea tan famoso como Drácula o La Momia, pero su historia también está relacionada con un descubrimiento científico.

En 1938 se encontró en Sudáfrica un celacanto, un extraño pez que se creía desaparecido desde hacía millones de años. El interés por este “fósil viviente”, y su conexión con “Creature from the Black Lagoon”, se basa en que animales como el celacanto pueden tener las claves del “salto a la tierra”, lo que permitió que algunos peces evolucionaran a los vertebrados terrestres que hoy conocemos. En el continente asiático, el pez de agua dulce conocido como perca trepadora puede vivir fuera del agua hasta seis días.