l desafío empieza al sonido de las espadas, al ritmo del pito y el tambor de cuero. La danza de Los Historiantes, a un lado los cristianos y al otro los moros, la inician saltando como si tuvieran resortes en los pies.
Mucho antes, numerosas personas aglomeradas en el parque esperan la danza de varios siglos, la representación de los moros y cristianos.
Los actores ponen en escena la historia de Carlomagno.
Los moros dicen: “Arma, arma, guerra, guerra”. Es la disputa de unas tierras entre los dos reinos.
El rey cristiano manda a decirle a “Hablarle a los tuyos, decirles a los moros jayanes de Normandías”. Y los niños no paraban de reírse cada instante por las divertidas ocurrencias de los actores.
El rey moro manda a su emisario a decirle a Carlomagno: “Toda nación, toda gente, Mahoma tenga por guía. Llevar media luna en la mano del turbante”. Y la guerra es ganada por los cristianos, llevando paz a los pueblos.
Según vecinos, en sus inicios Apastepeque estaba dividida en dos: una era Santiago Apastepeque y otra San Sebastián Saguayapa. Ambos fueron invadidos por los españoles, quienes llevaron las imágenes religiosas para ser veneradas.
Las máscaras que utilizan los historiantes tiene más de 75 años y son hechas de madera de cedro.