Escapa a tu monte interior

En tiempos lejanos cuando había peste, guerra, hambruna y sombra en el samsara o -desierto de la vida- los hijos del amor se iban a las montañas a fundar la ciudad de la Divina Luz. La misma que brillaba dentro de su propio ser. Busquemos juntos nuestro monte interior. Subamos la cumbre, cerremos los ojos y allí estará. Dentro de la sabiduría sánscrita hinduísta la voz “samsara” describe el ciclo de: nacimiento, vida, muerte y reencarnación o “renacimiento” en la tradición budista. Esta milenaria teoría de la existencia circular vive la humanidad sin muchas veces advertirlo. Nacemos, vivimos, pero en ese largo camino solemos “morir” en vida espiritualmente. Sólo escalando la montaña de nuestro ser se puede ascender al renacimiento y renacer de la vida. La cábala oriental anuncia: “Encontrarás un mejor escenario donde brillar” como estrellas en la noche del mundo. Actores de ese drama inmemorial -que ejemplifica el Mesías arameo en su divina resurrección- vamos por el desértico sendero en nuestra humana mutación -o evolución- naciendo, viviendo, muriendo y resurgiendo a la luz. Ante la dura hazaña de escalar nuestras cumbres interiores aún en tiempos sombríos, cuando el mundo anochece entre guerras, peste, hambruna y cataclismos. <“La Esfinge Desnuda” C. Balaguer-Amazon>