Los dos vigilantes privados acusados de asesinar a un agente de la Policía Nacional Civil (PNC) seguirán detenidos de manera preventiva, según resolvió el juzgado Décimo Quinto de Paz de San Salvador.
José Jesús Renderos y Tomás Antonio García Laínez enfrentaron la audiencia inicial por el homicidio del agente de la PNC, Carlos José Orellana, ocurrido el 28 de noviembre pasado, mientras compraba en el centro de San Salvador.
"Según las investigaciones realizadas, la persona que efectuó los disparos fue el señor José Jesús Renderos", dijo el fiscal del caso.
Agregó que "la representación fiscal está solicitando la medida más gravosa como lo es la detención provisional por estar en presencia de un delito de naturaleza grave".
Las investigaciones preliminares de la Fiscalía no arrojan las motivaciones que habrían tenido los imputados para asesinar al agente Orellana, quien estaba destacado en la División de Servicios Privados de Seguridad, en la sede central de la corporación policial.
"Uno de los principales testigos que tenemos es que la víctima se encontraba revisando unas compras cuando se dio una discusión de manera acalorada entre los victimarios y la víctima. Sin mediar más palabras, esta persona (Renderos) sacó su arma de fuego y le ocasionó de manera certera disparos a la víctima", dijo el fiscal.
Después del asesinato, los dos vigilantes huyeron hacia San Vicente, donde fueron capturados por la Policía.