Medio quinquenio vacío

Bukele enmarcó su propaganda auto-denominándose en su cuenta de Twitter como “Emperador de El Salvador”. En las siguientes horas, sus fieles diputados cyan salieron a apoyarlo en las redes sociales, enfatizando las mentiras y enalteciendo esta absurda idea

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El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta con el futbolista Ansu Fati luego de su renovación de contrato con los catalanes. Foto: Cortesía FC Barcelona

Por Andy Failer

2021-10-20 4:37:48

Aquel alcalde que prometió una obra por día para la capital salvadoreña lleva medio quinquenio al frente de la conducción de la Nación y no ha sido capaz de proporcionarle al país obras tangibles. ¿Qué ha hecho Bukele además de construir el mega centro de vacunación llamado Hospital El Salvador? Si hacemos un repaso de sus promesas nos encontraremos con una larga lista de proyectos que no pasan de planos y montajes bonitos, no pasan del humo propagandístico. Es más larga y real la lista de atentados contra la democracia encabezados por Bukele, que las obras de su gobierno.
Recientemente, a pocas horas de la masiva marcha del 17-O, me llamó muchísimo la atención que el presidente Bukele trató de desacreditarla asegurando que quienes marchan son personas que se están oponiendo a las “grandes obras” de este gobierno, entre las cuales, tanto él como su séquito de oportunistas, enlistan el nuevo “Hospital Rosales”, “la inclusión financiera del 70 % de la población”, “el viaducto de Los Chorros”, “el periférico Claudia Lars”, “la inversión social más grande de la historia” y “el hospital veterinario Chivo Pet”. Realmente es sorprendente el tamaño de su cinismo y el descaro de mentir de esa forma. Nada de eso es real, nada de eso se ha ejecutado al 100 % y claramente nada de eso existe aún. Minutos después de dicha ola de mentiras, Bukele enmarcó su propaganda auto-denominándose en su cuenta de Twitter como “Emperador de El Salvador”. Mientras el gobierno habla de cumplir con deudas históricas, realmente solo nos están endeudando como nunca antes en la historia de este país. Todo por el capricho de este personaje que se hace llamar Emperador.
En las siguientes horas, sus fieles diputados cyan salieron a apoyarlo en las redes sociales, enfatizando las mentiras y enalteciendo esta absurda idea de Bukele como Emperador. Esto nos revela otro hueco en la función pública: la falta de ideas y de sustancia política. Fanatismo en todo su esplendor. Para entender esto último, traigo como ejemplo otro suceso reciente: una diputada cyan, que en las pasadas elecciones encabezó la boleta del oficialismo por el departamento de La Paz, dentro del seno de la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales de la Asamblea Legislativa se jactó de dictaminar desfavorable una propuesta que buscaba despenalizar el aborto, cuando apenas meses atrás, ella misma usaba la pañoleta verde de aborto seguro, libre y gratuito. Para quien lea esto y esté en contra del aborto, dele vuelta al asunto: si esta diputada fuese pro-vida y el Presidente, por oportunismo claro, fuese pro-aborto, ella igual cambiaría de postura. Esto no es ideológico, insisto, es el enorme vacío de ideas, convicciones y sustancia política. Es que es abismal.
Considero que poco a poco la gente, sobre todo la que votó por este proyecto tan hueco, está abriendo los ojos. Y quienes resistimos frente a las mentiras y soberbia de este tirano tenemos que contagiar a las demás personas de la verdad y de las realidades que azotan a nuestro país. Dialogar, reunirnos con nuestros seres cercanos, vecinos, colegas del trabajo y discutir sobre lo que está sucediendo en el país representa una alta dosis de antídoto frente a este dictador millennial que babea por el poder absoluto y perpetuo. Es nuestro deber hacerlo, para que aquellas falsas obras por día que prometió para San Salvador no se conviertan en una obra por quinquenio para El Salvador.

Comunicólogo y político