Alza a salario entra en vigencia sin fondos para subsidio a las mipymes

El Gobierno aún no aclara de dónde saldrán los $100 millones que servirán para apoyar a pequeños negocios con el pago de la planilla.

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Las medianas y pequeñas empresas que están en la formalidad como los talleres y otros negocios tendrán que absorber el costo del aumento al salario mínimo antes de que llegue el subsidio para planilla. Foto EDH / Archivo

Por Magdalena Reyes

2021-07-30 8:50:31

Mañana entra en vigencia el aumento del 20% al salario mínimo que se aprobó el pasado 2 de julio en un escenario en el que no están aprobados los fondos que el gobierno le ofreció a la micro y pequeña empresa para subsidiar ese incremento salarial y tampoco está claro de dónde saldrá el dinero.

Sin embargo, los pequeños negocios sí deberán cumplir con subir el salario a sus empleados y enfrentar ajustes en sus finanzas con la esperanza de que el próximo mes les reembolsen el dinero, ya que de lo contrario la presión financiera los haría tomar medidas como cesar operaciones o hasta hacer despidos, según han dicho varios sectores ante el panorama que atraviesan.

Hasta ahora lo único claro es que la Asamblea ya reformó el Fideicomiso de Recuperación de las Empresas Salvadoreñas (Firempresa) para que le incorporen $100 millones que serán destinados al subsidio de las micro y pequeñas empresas que suban el salario mínimo. Sin embargo, ante la premura de la medida, el gobierno aún busca de dónde saldrá ese dinero.

El ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, solo ha dicho que los fondos saldrán del Fondo General de la Nación, pero sin detallar de qué partida o a que institución le recortarán presupuesto para ese fin.

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Zelaya explicó el pasado 20 de julio que han identificado un “espacio fiscal”, debido a que los préstamos internacionales que el país tiene que pagar del Fondo General se podrán cancelar por medio de créditos otorgados por otros organismos multilaterales, es decir, con el financiamiento de más deudas, entonces aprovecharán esos fondos para asignarlos al Firempresa.

Lo que acongoja a los pequeños negocios es si el gobierno les reembolsará el dinero a tiempo para seguir pagando la planilla de trabajadores.

“En este momento lo que reina en el ambiente empresarial es una gran incertidumbre, porque no se sabe a ciencia cierta cómo va a funcionar el proceso de entrega del subsidio para la implementación del inconsulto aumento del salario mínimo”, asevera el director ejecutivo de la Cámara de Comercio e Industria, Federico Hernández.

El encargado de entregar el subsidio a las mipymes será el Banco de Desarrollo de El Salvador (Bandesal), el cual administra el Firempresa. El presidente de esa institución, Juan Pablo Durán, dijo esta semana que el subsidio se comenzará a pagar hasta el próximo 15 de septiembre, es decir un mes y medio después de que entre en vigencia el aumento salarial.

Ante ello, Hernández considera que “si ese subsidio llega tarde y esa tardanza equivaliera a dos o tres meses, los micro y pequeños empresarios se van a ver forzados a tomar decisiones muy duras, incluyendo la reducción de personal”.

Durán afirmó que a partir del 16 de agosto los patronos de micro, pequeñas y medianas empresas podrán registrarse en el sitio web Firempresa para solicitar el subsidio por el incremento del salario mínimo.

“Sostener una pequeña planilla cuando ni siquiera se ha logrado la sostenibilidad que se tenía antes de la crisis generada por la pandemia, ya era un problema serio antes que al presidente Nayib Bukele se le ocurriera aumentar el salario mínimo en un 20%”, afirmó Hernández.

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La medida de subir el salario fue anunciada el 1 de julio, el mismo día que Estados Unidos reveló la Lista Engel donde se incluyó a varios funcionarios del gabinete de Bukele, así como a miembros de partidos de oposición.

Tanto para Hernández como para el asesor de la Sociedad de Comerciantes e Industriales Salvadoreños (SCIS), Ramón Rivera, la falta de certidumbre es producto de la premura con la que se tomó la decisión. “Nadie en su sano juicio se opondría al aumento del salario mínimo, dadas las circunstancias económicas del país y el hecho de que la canasta básica ha venido aumentando después del último aumento al salario mínimo, sin embargo es una lástima que la medida haya sido tomada desde una perspectiva meramente política y no desde una perspectiva económica ni tomando en cuenta al sector empresarial”, señala Rivera.

La academia también ha realizado estudios sobre el impacto del incremento salarios. Una encuesta de la Universidad Francisco Gavidia reflejó que 2.3 millones de personas quedarán fuera del incremento y que puede frenar la recuperación de empleos.