En el Día del Profesor en El Salvador no pudimos evitar recordar a una enorme persona, con gran pedagogía y pasión por el deporte salvadoreño. Hoy recordamos al profesor Manuel de Jesús Cañadas y una anécdota mítica.
Con el equipo de Atlético Marte el profesor Manuel Cañadas vivió grandes momentos, y uno de ellos fue haber jugado ante el Santos de Pelé, equipo brasileño con época gloriosa en los años sesenta y setenta.
Una vez en Panamá, en 1971, Atlético Marte y Santos F.C. se juntaron para disputar un partido amistoso en tierras panameñas, en lo que hoy en día se conoce como Estadio Rommel Fernández, de la capital. Escenario donde juega siempre la selección canalera.
Manuel Cañadas, defensor, iba de suplente eses día, y no se imaginó que iba a marcar a Pelé, la sensación total del equipo sudamericano.
¿Cree usted que el partido ante el Santos es uno de los mejores de su vida?
Sí. Hoy en día las figuras de Cristiano Ronaldo y Messi sobresalen como auténticos genios del fútbol. Sin embargo a la hora de elegir lo mejor de lo mejor hay que nombrar a Pelé. Uno se hace muchas fantasías al momento de saber que va a jugar con él. Tuve la suerte de hacerle marca en el juego con Marte y puedo decir que si es uno de los más bonitos partidos, sobre todo por el resultado que sacamos.
¿Qué destaca en lo personal de aquel juego?
Definitivamente la hazaña de no perder. Es algo que estábamos mentalizados en lograr, pero que considerábamos difícil. Al final se logró, y con todo y lo que involucró eso. No éramos favoritos, ni apoyados por la afición, que era neutral con tendencia a apoyar al equipo brasileño. Lo importante fue la experiencia de habernos medido con gente de calidad mundial.
Igualaron, pero seguro lo tomaron como una victoria…
A los 17 minutos del primer tiempo ya íbamos perdiendo 1-0. En eso César Luis Condomí, uno de los compañeros, se lesionó, y tuve que entrar para relevarlo. Hernán Carrasco, en aquel entonces técnico del Marte, me mandó a marcar específicamente a Pelé. No jugué mucho, pero tampoco lo dejé jugar a él. Incluso dijo algunos improperios en portugués contra mí. No le gustaba que alguien pudiera meterle pierna fuerte.
¿Qué dijo Luis Condomí cuando lo sacaron?
Un desgarro es doloroso, él sabía que no podía jugar más cuando le ocurrió en los primeros minutos del partido. Nuestra meta era que no nos golearan. Quedamos al final 1-1, creo que no perder fue la mejor cosa que pudo habernos pasado.
¿Cómo preparó Marte el partido contra Santos?
Fue un momento muy especial para el equipo. “Don Hernán” nos mandó a trabajar de forma específica para hacer un buen papel. Estuvimos concentrados una semana completa para poder sacar lo mejor de nosotros ante Santos. Solo el hecho de que no nos golearan ya era un triunfo. En los refuerzos de ese momento para el equipo, tuvimos a “Cascarita” Tapia, uno de los mejores jugadores panameños que conocí.
¿Qué sensación le generó marcar a Pelé, en ese momento tricampeón del mundo?
En lo personal creo que motivó el hecho de poderle hacer frente a un tipo que aparte de ser campeón mundial había marcado más de mil goles. Lejos de inhibirnos, sentimos emoción por poderle hacer frente a semejantes figuras, entre ellas Pelé. Ellos tenían dos refuerzos argentinos de gran nivel, Agustín Mario Cega (Portero) y Ramos Delgado (Defensor). Extraordinarios jugadores que mostraban categoría en aquel momento, Santos era considerado el mejor equipo del mundo.
¿Intercambió camisa con Pelé al final del juego?
Mario Castro, un sonsonateco que iba como refuerzo nuestro para el duelo ante Santos, se le tiró encima a Pelé y cuando yo quise reaccionar ya no pude pedirle al astro brasileño que me diera su camisa. Y bueno, eso no dejó de ser una experiencia preciosa. Lo más importante para mí, es que cuando terminó el partido, varios de mis compañeros corrieron a abrazarme. Anular a un futbolista de esa categoría, fue una hazaña. Haber parado al mejor jugador del mundo, y quizá de la historia.
¿Cómo reaccionó Santos tras no poder vencerlos?
Nunca nos menospreciaron. Recuerdo que a Pelé siempre lo sacaban minutos antes de terminar cualquier juego para evitar la situación de que le pidieran la camisa. Ese día lo dejaron jugar todo el partido con la esperanza de que pudiera cambiar la historia del marcador. Los jugadores del Santos fueron muy caballerosos, a diferencia por ejemplo de los argentinos que recientemente se enfrentaron a El Salvador. Recuerdo que hubo hasta la posibilidad de ganarles, Elenilson Franco estuvo a punto de sellar la victoria para nosotros.
¿Fue entonces Pelé el jugador más grande al que se enfrentó?
Indudablemente. Con la selección juvenil de El Salvador jugué contra excelentes equipos como Estudiantes de la Plata, Emelec, River Plate; grandes monstruos del fútbol mundial. Aquella convivencia que se dio a la orilla de la cancha me permitió compartir con más jugadores de altísimo nivel.
¿Volvió a ver de nuevo a Pelé?
Lo volví a ver en 1973 cuando Santos jugó contra Alianza en el “Mágico” González. A mí me llena de mucho orgullo haber podido recordar que jugué contra él un año antes. No ese orgullo que irradia soberbia, sino de alegría, por compartir con un gran jugador como lo fue él.