La APES dice que no descarta sacar a periodistas del país identificados en alto riesgo de persecución por el gobierno

La Asociación hace un llamado a la comunidad internacional para que ponga sus ojos en El Salvador, ante el “grave deterioro de la libertad de prensa y de expresión”, tras las declaraciones del Ministro de Seguridad de que están “dando seguimiento” a periodistas que hacen “apología del delito”

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Fotoperiodistas y camarógrafos documentan el acontecer de la Asamblea a pesar que fue obstaculizado su acceso. Foto Archivo - EDH/ Yessica Hompanera

Por Eugenia Velásquez

2021-06-09 12:40:17

En rueda de prensa, la presidenta de la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES), Angélica Cárcamo informó que están implementando y fortaleciendo los protocolos de seguridad y que “incluso no descartamos poder sacar a periodistas en caso identifiquemos que pueden ser personas de alto riesgo que podrían ser capturados si siguen teniendo una agenda de investigación en contra de la impunidad”, señaló.

Las declaraciones de Cárcamo hacen alusión a lo revelado por el ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, en una entrevista radial de YSKL, que están dando “seguimiento” a periodistas que, según el funcionario, hacen “apología del delito”.

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Cárcamo exhortó a la comunidad internacional a poner sus ojos en El Salvador, un país que se enrumba a regímenes totalitarios en donde se coarta la libertad de prensa y se ataca a periodistas que no se alinean al gobierno, ejemplos en la región: Nicaragua, Honduras y Guatemala, expresó.

“Venimos a presentar nuestro llamado de atención a la comunidad internacional. Este tipo de declaraciones (sobre seguimiento) se hace en contra de delincuentes. El trabajo periodístico es un trabajo legítimo en cualquier país democrático. No se debe confundir oposición con el trabajo periodístico”, explicó Cárcamo.

Por su parte, el relator de la Libertad de Expresión, de la APES, Serafín Valencia, recordó que antes de la firma de la Paz en 1992, existían esas prácticas de represión en contra de periodistas que el gobierno consideraba en su contra y según las declaraciones del Ministro de Seguridad, se corrobora que siguen existiendo organismos de inteligencia del Estado que se dedican a perseguir a los que califican como sus opositores.

La APES cuenta con 4 denuncias específicas de periodistas que temen por su integridad personal al ser víctimas de seguimiento hasta en sus casas, con la toma de fotografías y lo peligroso es que no se sabe qué uso le darán a esa información, reiteró Valencia.

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“Antes lo que hacían era preparar casos ficticios para proceder contra los que consideraban opositores o en el peor de los casos amenazas a colegas periodistas. Recordemos las declaraciones del presidente del 1 de junio que pasarán al quinto paso de desbaratar al aparato ideológico que mencionaron también a los medios de comunicación”, afirmó.

Los cierres de acceso a la prensa a escenas donde se han cometido delitos como es el caso de Panchimalco, en Chalchuapa y en la misma Asamblea el 1 de junio de “poner ese corralito mismo para evitar el acceso y el desplazamiento libre hacia fuentes de información, eso nos genera más preocupación”, sostuvo Valencia.

El representante de los medios comunitarios de Fespad, ejemplificó que lo que hizo Villatoro en otro país que se dice ser democrático el funcionario ya hubiera renunciado a su cargo.“Hubiera sido un escándalo que el Ministro de Seguridad le da seguimiento y espía a periodistas, se va, es un escándalo. Que un ministro de Seguridad reconozca que espía a periodistas y medios es un escándalo y se va media hora después en un país democrático”, relató.

Explicó que cuando el ministro de Seguridad habla de límites, debe entender que los límites son para el Poder y que por eso debe haber separación de Poderes.

“Si hay alguien aquí que se salta los límites de la libertad de expresión es el gobierno, uno no puede calumniar, difundir información falsa, pero en este país el principal calumniador es gente del gobierno. Un presidente no podría usar una cadena nacional para atacar a periodistas, académicos, activistas y difundir discursos de odio, el presidente de la República es de todos, es obligación del presidente buscar la armonía social, su rol es estar uniendo a la sociedad y no dividiendo”, afirmó el representante de Fespad.