La traída de 2,791,080 dosis de fármacos contra el COVID-19 y su aplicación en miles de salvadoreños son de lo mejor que ha hecho el Ejecutivo en cuanto a salud en estos dos años
El Gobierno ha tenido la capacidad de gestionar la venida al país de casi 3 millones de vacunas, desde el arribo del primer lote el 17 de febrero de 2021, y también ha sido efectiva su administración para las aplicaciones de las dosis a la población, comentó el médico salubrista Ricardo Lara.
VER: 631,925 personas han recibido las dos dosis de vacuna anticovid
“La vacunación ha sido efectiva, un logro importante, que es el reflejo de un programa que siempre fue exitoso, y que hoy lo demostró, con la facilidad que tuvieron con el montaje de la capacidad instalada, para dar respuesta a la masificación de vacunación”, aplaudió Lara.
Con la instalación del megacentro de vacunación en el Hospital El Salvador, con el cual el Gobierno sostiene que está vacunando entre 40,000 y 50,000 personas al día, se acelera la aplicación de inmunizaciones. Para echar a andar ese megacentro “hubo algunas fallas logísticas en el camino, como la aglomeración de ancianos en los parqueos de los centros comerciales; pero se rectificó, y hoy en día no hay un solo salvadoreño que esté en contra o critique lo que ha sido este proceso de la vacunación”, opinó Lara.
El Gobierno también desencadenó una ola de críticas tras el anuncio, a inicios de enero, de la 156 cabinas o módulos para vacunación a un costo de $5 millones. NO ha habido un informe del total de cabinas construidas, ni de la inversión hecha.
Para el salubrista fue importante que el Gobierno invirtiera en la construcción del Hospital El Salvador, el centro médico de referencia al que envían los demás hospitales a las personas con sospechas o casos confirmados de COVID-19. “He sido crítico en situaciones muy puntuales en cuanto a la gestión de la pandemia, pero soy de los que nunca criticó el Hospital El Salvador”, dijo Lara, “porque en primer lugar ahí se salvan vidas, y en segundo lugar se tenía que dar una respuesta, y en tercer lugar, hay colegas del sector salud trabajando ahí”. Lara también consideró que, a comparación de administraciones anteriores, ha mejorado el abastecimiento de medicamentos e insumos, si bien todavía hay mucho margen para un servicio superior.
En cuanto a las pruebas PCR-RT que hace el Gobierno, el médico explicó primero que “me hubiera gustado conocer la incidencia acumulada de COVID-19 para El Salvador, la sumatoria de los casos nuevos que van surgiendo en el día a día. Eso nos permitiría ver la rapidez con que se están contagiando las personas, ver si se está logrando controlar la transmisión de la enfermedad como tal. Adolecemos de ese dato”, lamentó, y luego explicó la importancia de este dato desconocido: “La incidencia acumulada nos pudiera permitir estratificar los municipios. Se tendría que mejorar la decisión de los lugares donde se va a hacer los tamizajes de prueba”.
Lara remarcó esta situación con las pruebas, pues “a pesar de que ya hay varios laboratorios privados que hacen la prueba, el grueso de la población, que tiene la ansiedad de querer tener esa prueba, los hace estar buscando en qué municipio van a estar los kioscos, y se desplazan a ese municipio. Entonces, por poner un ejemplo, ¿qué tan veraz que una persona que se le tomó la prueba en Izalco, vivía en Izalco? Probablemente viajó desde Sacacoyo”.
También certificó Lara que ha habido una preocupación del Gobierno por hacer ciertas mejoras estéticas en las instalaciones del sector salud, y también hay algunas reconstrucciones y mejoras; pero subrayó que “no solo se trata de pintar un establecimiento de salud, que puede verse bonito, pero más allá de eso, es muy poco tiempo para lograr decir que se ha logrado un cambio radical en la infraestructura”, como lo ha mencionado el Gobierno en distintas publicaciones en redes sociales.