Ya sin circo ni pasado, Mascarada se ganaba la vida actuando en bares y plazas como malabar y traga-fuegos. Así, entre hombre y dragón pasó algún tiempo. Cuando todo parecía palidecer en su vida apareció una nueva mujer en su camino: Selene, cantante del club nocturno “El Sueño Azul”. La misma quien de alguna manera le devolvió sus perdidas ilusiones. Todos sus pasados y perdidos amores no habían podido conocer su rostro enmascarado. Sin embargo, esta visionaria mujer llegaría a descubrirlo. “Quiero saber qué rostro esconde este farsante actor del amor” -dijo para sí misma. Una noche que Mascarada bebía, Selene puso en su vaso de licor un fuerte somnífero. Ya dormido, la mujer llegaría a conocer la oculta faz de su enigmático amante. Fue conmovedor el momento de quitarle la máscara y descubrirla: ¡Tenía el rostro de un ángel! “Nunca has podido ver tu imagen porque no has llegado a conocerte” -le dijo la cantora, la cual podía ver lo invisible. “¡Mi tragedia es que la perdí al nacer y con ello me perdí a mí mismo!”, exclamó con aire de desengaño el actor. No obstante -estando a solas ante el espejo- su alma le dijo la verdad desde el azogado cristal: “Hace muchos años, al momento de nacer murió tu madre. Entonces el mensajero de la muerte robó tu rostro de ángel para usarlo en el carnaval y así engañar a quienes iban a morir”. (XLVIII) <“La Máscara que Reía” de C. Balaguer>
El ángel enmascarado del amor

2021-04-22 5:40:51