El Dr. Mario Enrique Ancalmo, presidente honorario de Establecimientos Ancalmo, fue condecorado el pasado jueves, con una de las distinciones más importantes que la Asamblea Legislativa puede entregar: Hijo Meritísimo de El Salvador.
De acuerdo con el artículo 6, del Título 11 de Ley de Distinciones Honoríficas, Gratificaciones y Títulos, el reconocimiento de Hijo Meritísimo de El Salvador que se entrega desde el año 2002, es otorgado a aquellas personas que se dedican o hayan dedicado parte de su vida a generarle un beneficio trascendental al conocimiento humano. Sea nacional, regional o universal.
Gracias a su trayectoria musical como profesional, el Dr. Mario Ancalmo ha marcado la vida de grandes y pequeños, con su dinamismo, alegría y talento, además de aportar centenares de oportunidades a jóvenes con Fundación Ancalmo.
El ahora Hijo Meritísimo de El Salvador, inició su etapa musical en 1956, teniendo un recorrido exitoso, participando con el Trío Escobar Ancalmo en toda Centroamérica, México y Japón, poniendo en alto la nación con sus melodías inspiradas y dedicadas a temas, costumbres y lugares emblemáticos del país.
La vida y trayectoria del Dr. Ancalmo se puede dividir en tres etapas: la empresarial, gremial y la musical.
La etapa empresarial empezó en 1963, donde parte de su trabajo era recorrer de punta a punta todo el territorio salvadoreño y en ocasiones también las hermanas repúblicas vecinas. Conocer de cerca la realidad del pueblo salvadoreño, acrecentó su amor por la patria. Esto gracias al valioso aporte que sus padres, el Dr. Antonio Calderón Morán y Doña Graciela, realizaron en 1938 al establecer la Farmacia Alemana (posteriormente Farmacia Bolívar) y Laboratorios Ancalmo. Contexto bajo el cual pudo desarrollarse como empresario e ir construyendo lo que ahora son las empresas Ancalmo, que durante su actividad económica han recibido importantes reconocimientos en la rama de la exportación y buenas prácticas.
La etapa gremial, basándose en la defensa del territorio de la profesión, defendiendo la gremial farmacéutica. Siendo además pionero en la industria farmacéutica nacional en INQUIFAR y también miembro de la Asociación Latinoamericana de Industrias Farmacéuticas (ALIFAR).
La etapa musical, se formó desde que el Dr. Ancalmo era muy niño, y es en esta etapa donde se permitió realizar más acciones culturales por nuestro querido país. En el año 2005, decide crear la Fundación Ancalmo, con el apoyo de la empresa farmacéutica familiar, iniciando una escuela de música con pocos alumnos y que poco a poco fueron aumentando. Esta iniciativa se creó para poder ser "oportunidad para los jóvenes con talento”, por lo que la enseñanza, costo y la calidad de lo que se imparte, tiene esos requisitos. Las clases incluyen danza, teatro, coros vocales y otras actividades artísticas, inculcando a los alumnos el llamado "proyecto Timoteo”, que significa aprender y enseñar a otros.
"El mayor aporte que los salvadoreños podemos dar a la patria y la mayor justicia social que se puede hacer es la creación de oportunidades y eso es la educación”, aseguraba el Dr. Mario Enrique Ancalmo en su discurso de agradecimiento.
El reconocimiento como Hijo Meritísimo del Dr. Mario Ancalmo simboliza su valor, importancia y amor a la nación, lo que se traduce en un mérito que es gracias a su trabajo, su música, enseñanzas y obras que han marcado generaciones de profesionales, músicos, amigos y compañeros.