Fuerza Armada dio de baja a teniente por emborracharse, pero no sancionó al hijo del ministro que hizo lo mismo

Luego de nueve meses de mantenerlo, a manera de castigo, en el último cerro de la Isla de Meanguera, La Unión, el 31 de enero le dieron la baja por dos años.

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El ministro René Francis Merino Monroy convocó al Tribunal de Honor de la FAES que conocieran el caso del teniente Cristian Adalberto Castro Grijalva, quien se emborrachó durante una licencia. Foto EDH / Archivo

Por Jorge Beltrán Luna @Jbeltranluna_

2021-02-08 9:20:19

A mediados de abril de 2020, en redes sociales y blogs de noticias se difundió un vídeo en el que aparecía un hombre, supuestamente borracho, vistiendo algunas prendas femeninas. Luego se supo que era un teniente de la Sexta Brigada de Infantería, con sede en Usulután, quien junto a un empleado de ese mismo cuartel, se habían emborrachado y escandalizaban mientras, hacían uso de 48 horas de licencia.

La Policía Nacional Civil los capturó en el municipio de San Francisco Javier por el delito de resistencia pero a los dos días, fueron puestos en libertad.

Ministro de Defensa prefiere callar

Desde el 28 de enero, El Diario de Hoy gestionó una entrevista con el Ministro de la Defensa, a través de la Dirección de Comunicaciones y Protocolo; ante la ausencia de respuesta, se le solicitó de manera pública al funcionario, sin embargo, tampoco hubo respuesta.

Menos de un mes antes de la captura del teniente Cristian Adalberto Castro Grijalva, en el cuartel de la Segunda Brigada Aérea, con sede en Comalapa, el 20 marzo, once oficiales (nueve de la Fuerza Aérea y dos de la Fuerza Naval), entre estos el teniente de fragata, Gerardo Antonio Merino Marroquín, se pusieron borrachos en el casino de oficiales, a pesar de la prohibición expresa, del comandante y ejecutivo (segundo al mando) de la brigada, de no consumir alcohol, debido a la emergencia por la pandemia de COVID-19.

De acuerdo con documentos a los que El Diario de Hoy ha tenido acceso, el 24 de junio, el ministro de Defensa, contraalmirante René Francis Merino Monroy convocó al Tribunal de Honor para que conociera el caso Castro Grijalva.

Ya para el 5 de octubre, el tribunal de honor recomendó “que es procedente ordenar la baja del Tte. Inf. Cristian Adalberto Castro Grijalva por un período de dos años”. Esa, según documentos oficiales, era una resolución definitiva, con la cual, el referido oficial saldría de baja en la Orden General del 31 de octubre de 2020.

El actual ministro de Defensa tiene tres hijos que son oficiales de la Fuerza Naval. Haber informado que uno de ellos se emborrachó junto con 10 oficiales más, derivó en consecuencias negativas para un coronel.

Sin embargo, abogados del oficial interpusieron un recurso ante el tribunal de honor, de lo cual también entregaron copia a la presidencia de la República, el 21 de octubre, con lo cual se había frenado la decisión del tribunal de honor.

De acuerdo con los documentos, el proceso contra Castro Grijalva estuvo plagado de ilegalidades tales como “Atentados relativos al derecho de defensa, prevaricato, omisión de investigación… y violaciones a los Derechos Humanos”.

Recusan a Merino Monroy

En el recurso de apelación a la decisión del tribunal de honor, los abogados de Castro Grijalva expusieron que el ministro de la Defensa, Merino Monroy, no ofrecía ninguna garantía de imparcialidad y con su decisión comprometía al presidente de la República en su calidad de Comandante General de la Fuerza Armada; “Especialmente, si dicho funcionario no ha sancionado y mucho menos ha ordena(do) instruir informativo Militar contra un Oficial de la Fuerza Naval con el grado de teniente de fragata Gerardo Antonio Merino Marroquín; pues a pesar de ser hijo del ministro de Defensa la Ley no hace distinción entre ambos…”.

Según el documento, el teniente Merino Marroquín, en plena pandemia con fecha 20 de marzo de 2020, realizó actos contrarios a las buenas costumbres al ingerir bebidas embriagantes, vulnerando con ello la cuarentena domiciliar y con ello el Decreto Legislativo No 593 de fecha 14 de marzo de 20202, con el agravante que lo hizo dentro de la instalación militar.

El Diario de Hoy informó este lunes que el coronel Eduardo Alfonso Salazar García, segundo al mando de la brigada aérea donde el teniente Merino Marroquín y otros 10 oficiales se emborracharon, tuvo graves consecuencias laborales por haber informado de ese incidente, a tal punto de degradarlo en cuanto a empleo y, por último, darle la baja.

Al último cerro de El Salvador

El recurso de apelación logró frenar por tres meses la decisión de dar la baja a Castro Grijalva. Pero en la Orden General del 31 de enero anterior, por fin le dieron la baja.

De acuerdo con fuentes castrenses, en este caso la cúpula que actualmente dirige a la Fuerza Armada muestra una doble moral, porque en el caso del teniente Merino Marroquín, además de castigar al coronel Salazar García, también el propio ministro de Defensa lo increpó preguntándole qué potestad tenía para enviar a uno de sus hijos al Comando Sumpul, la unidad que cuida las fronteras.

Según relató el coronel a El Diario de Hoy, no fue él quien dio esa orden, sino el jefe del Estado Mayor Conjunto de la Fuerza Armada, aunque la dio de manera verbal, diciendo que a los once los entregaran al Comando Sumpul.

La doble moral, según las fuentes militares se refleja en que a Castro Grijalva, inmediatamente que éste fue puesto en libertad, fue enviado al cerro El Evaristo, en la isla de Meanguera, y allá lo mantuvieron hasta una semana antes de darle la baja, mientras que para el hijo del ministro no hubo ni proceso sancionatorio ni castigo.