A Hazel le tomó por sorpresa una llamada telefónica que recibió su familia de parte de la municipalidad para notificarle que había sido elegida como la nueva reina de las fiestas patronales de Ahuachapán, en honor al Dulce Nombre de Jesús.
La pandemia provocada por el coronavirus obligó a las autoridades locales a suspender la mayoría de las actividades que se realizan en el marco de las fiestas, entre ellas el evento de elección de la soberana.
Pero no querían que una de las principales tradiciones (tener a su reina), se dejara de hacer. Por ello, buscaron a una señorita que reuniera aspectos como integridad, belleza, originaria de Ahuachapán, y que tuviera entre los 15 y 18 años, entre otras cualidades, para que fuera la nueva reina.
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Esos requisitos fueron cumplidos por Hazel Abigaíl Santos Méndez, de 17 años, quien será coronada como reina de los ahuachapanecos.
El acto será restringido para evitar aglomeraciones de personas, y con ello, evitar posibles contagios de coronavirus.
“Es algo bonito, experiencias nuevas, pero difícil por la situación en la que estamos con esta enfermedad que nos vino. Tenemos fe que todo va a pasar y siempre celebramos al Dulce Nombre de Jesús. No me imaginaba (ser electa reina); pero era un sueño y ahora se me dio la dicha de ser la reina de las fiestas patronales”, contó la joven, quien es la segunda hija en el hogar de sus padres.
La ahuachapaneca relató que es su primera experiencia en este tipo de actividades, aunque relató que de pequeña soñaba con ostentar dicho título. Cuando escuchaba hablar a las reinas, lo repetía como un juego de que ella también era parte de las festividades.
Su sueño se hizo realidad en medio de una situación sanitaria difícil; pero que “en nombre de Dios” todo se desarrollará con normalidad.
La joven estudia segundo año de bachillerato, practica baloncesto y le gusta cocinar postres. En un futuro prevé estudiar medicina y especializarse en el área forense.
“Tengamos fe de que todo va a pasar; esperamos y confiamos en Dios que el otro año sea diferente y podamos tener esas fiestas patronales como pensábamos que íbamos a tener este año”, reflexionó la joven.
El alcalde, Abilio Flores, señaló que el enfoque de las fiestas son, principalmente, las actividades religiosas; pero que en el caso de la coronación será en un evento simbólico y restringido para evitar aglomeraciones de personas.
Este podría realizarse en el Centro para la Cultura y las Artes Alfredo Espino o en el Centro Juvenil El Salvador-Corea; pero aún no está definido el lugar ni la fecha. Tendría que ser entre viernes y sábado.
El domingo 14, que será el propio día de las festividades, la alcaldía realizará una quema de pólvora en la iglesia Nuestra Señora de la Asunción y también en ocho puntos estratégicos de la ciudad, para que la población se sume a los festejos.
La comuna destinará un presupuesto de $18,000 para la realización de las actividades que se desarrollarán, incluyendo el apoyo a la iglesia católica.
El párroco de la iglesia Nuestra Señora de la Asunción, padre Oseas Borja, explicó que el domingo a las 10:00 de la mañana se realizará la misa concelebrada.
Aunque no especificó a cuántas personas permitirán el ingreso a la misma, señaló que el atrio será habilitado para que los feligreses puedan estar presentes en la misa.
La alcaldía señaló que también habrán pantallas en dicho sitio para la transmisión de dicha misa y de otras que se desarrollarán.
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El padre dijo que habrá una procesión a las 4:00 de la tarde; pero que el patrono irá en un vehículo, tal como lo han realizado en diferentes procesiones desde que inició la emergencia de la pandemia.
“El protocolo es el que hemos estado siguiendo todos estos días: alcohol gel, toma de temperatura, y desinfección de las suelas de los zapatos”, manifestó el padre Borja.
