Roberto Rivera Ocampo, candidato a diputado propietario por La Libertad bajo la bandera de VAMOS, es una de las caras que busca llegar a la Asamblea Legislativa en las elecciones de 2021.
En una conversación con El Diario de Hoy, afirmó que parte del estancamiento social y político de El Salvador es producto de la polarización política y la tensión que el Gobierno de Nayib Bukele ha propiciado en los últimos meses y su constante confrontación con los otros órganos del Estado
Ocampo dice que ha intentado estar al servicio de la población tres veces: la primera como candidato a diputado independiente para las elecciones de 2018, pero no logró las firmas necesarias para su inscripción; la segunda como candidato a la vicepresidencia por Vamos en las elecciones de 2019, y esta vez que corre como candidato a diputado para las elecciones 2021.
“El partido Vamos es el único en el que me sentí representada, el partido que no fue apéndice de otras fuerzas políticas ya existentes, un partido que está conformado por ciudadanos que pasamos de la queja a la acción”, manifestó por su parte Lissette Rivera, compañera de fórmula de Ocampo.
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Ambos candidatos de VAMOS están convencidos de que tanto el actual gobierno como los anteriores han desperdiciado su oportunidad de cambiar el rumbo del país. “Lamentablemente estamos al borde de un precipicio por una acumulación de factores que no han sido resueltos en varias décadas. Pero este Gobierno tuvo la oportunidad de tomar ciertas decisiones que podrían haber cambiado el rumbo, pero en un país altamente endeudado todo se complica porque el margen que se tiene para invertir en educación y servicios básicos es muy inestable”, manifestó Ocampo.
Ocampo ha intentado estar al servicio del pueblo tres veces: la primera como candidato a diputado independiente para las elecciones de 2018, pero no logró las firmas necesarias para su inscripción; la segunda como candidato a la vicepresidencia por Vamos en las elecciones de 2019 y esta vez que corre como candidato a diputado para las elecciones del próximo año.
El candidato tiene un máster en relaciones internacionales, dos postgrado en temas políticos, dirección y gestión empresarial. También fue fundador de Acción Ciudadana, presidente de Iniciativa Social para la Democracia (ISD) y actualmente es socio director de la empresa consultora R&R International, dedicada a la asesoría empresarial de MYPIMES. Además de cofundador del negocio de distribución de alimentos LapapaLapapa.
Prioridad: Una ley de función pública
Teniendo en cuenta el contexto actual, y los últimos casos de presunta corrupción por parte del Gobierno y que son objeto de investigación, una de las propuestas prioritarias de Ocampo y Rivera es la ley de la función pública. El objetivo sería reducir el riesgo de nepotismo y las contrataciones por preferencias, lastres de la profesionalización del sector público y del necesario salto de calidad de los servicios que el Estado provee.
El candidato a una curul en las próximas elecciones aseguró que aprobar una ley de la función pública sería un avance en el país y con ello se procuraría alcanzar una clase política que trabaje en función de la población salvadoreña y no por intereses políticos y económicos como, afirma, ha ocurrido hasta ahora.
“La ley de la función pública reduciría el riesgo que tenemos hoy de nepotismo, contrataciones a dedo, plazas fantasma, y queremos ver si esta masa de servidores públicos que tenemos ahora y que consumen el 35 % de nuestro presupuesto estarían de acuerdo en que todo esto sea regulado por una ley y que todo aquel que quiera participar en política esté capacitado para ello”, manifestó Ocampo.
También enfatizó en la importancia de defender la institucionalidad, porque es el pilar principal en el que se fundamenta la democracia y el desarrollo de un país. Criticó la tensión permanente que el Ejecutivo ha provocado en los últimos meses, además del abandono en el aspecto económico, la poca importancia que se ha dado al medio ambiente y desarrollo social.
Aseguró que estos factores generan inestabilidad porque a inversionistas extranjeros les hace pensar que el país puede llegar a una “convulsión social y política”, lo que representa un costo demasiado alto.
Además, afirmó que si no hay un respeto a la ley, es probable que se conozca más casos de presunta corrupción. Señala que si la deuda crece sin garantizar inversiones estratégicas, El Salvador no podrá avanzar en su
desarrollo.
Ocampo dejó claro que de llegar a la Asamblea no descartan formar alianzas con otras fracciones si fuera necesario, dependiendo de la coyuntura, los principios y valores o el beneficio para la población salvadoreña.
Una nueva oposición
Ocampo no duda en afirmar que VAMOS representa un cambio a largo plazo porque no son “una ‘llamarada de tusa’ como otros proyectos políticos de hoy que quieren llegar a la Asamblea para elegir a sus magistrados y fiscales”. Señaló que este partido trabajará desde el Legislativo por hacer respetar la ley.
“Queremos liderar la oposición, una oposición que ha estado opacada y ha aprobado todo lo que le han pedido sin ninguna o pocas exigencias. A este país le falta una oposición constructiva que se pare firme y garantice el control político de las instituciones”, dijo Ocampo.
Por su parte, Lissette Rivera señaló que además de ser una oposición fiscalizadora, también contribuirán a unificar la clase política porque ayudarían a romper la polarización.
“Estamos definidos en que no vamos a consentir ningún acto de corrupción, vamos a estar al frente señalando los abusos que el Gobierno y otros partidos han hecho a través de la función pública. Somos la oposición que va a promover la unión que el país necesita a través del desarrollo de nuevas instituciones públicas”, dijo la candidata a diputada suplente.
Para Rivera, los candidatos de Vamos marcan la diferencia porque no son parte de la clase política que tiene en descontento a la población. De hecho, considera como una ventaja que el partido sea nuevo porque la “bandera está limpia y no tiene pasado político”.
“Los políticos actuales han decepcionado a este país, existe mucha queja, mucha decepción por el mal manejo que los políticos han dado a nuestro país y en este sentido creo que como partido, al presentar una propuesta política nueva e innovadora, podemos ser la opción que convenza a la ciudadanía”, expresó Rivera.
El emprendimiento, la clave para la economía
“El Salvador es un país de emprendedores, ya sea por necesidad o porque tienen una visión, una libertad financiera”, dice Ocampo, quien está convencido que apostar a los microempresarios y brindar oportunidades podría ser la clave para fortalecer la economía y posicionarse en mercados internacionales con productos propios.
Lissette Rivera Flores es abogada, ejerce su profesión desde 2016, actualmente trabaja como delegada en la Junta de Vigilancia Electoral del Tribunal Supremo Electoral. Ejerce como abogada en el área de derecho de familia y penal y representante de la ONG “Trabajemos por La Paz” en la Red de Atención Compartida RAC del ISNA.
Tiene un diplomado en Criminalística y Medicina Forense. Además de formación en sistemas políticos y gestión pública, derechos humanos, temas electorales y democráticos.
El candidato considera que el Estado debe de estar al servicio de los microempresarios, facilitar espacios, oportunidades y servicios para contribuir a su desarrollo. “El Estado debe ser un facilitador de negocios, los servicios que presta en materia económica deberían estar concentrados en un solo lugar de manera que estén accesibles para todo aquel que quiera emprender o si ya está en otro nivel poner un negocio, una industria”, dijo.
Aseguró que el emprendedurismo es uno de los tres ejes de su propuesta de campaña donde se detalla que es necesario un lugar físico donde se encuentren todos los servicios que los microempresarios necesitan, desde
diseñadores para logos, administración de redes hasta registro de la marca. La idea es trabajar un plan que esté basado en una economía de escala donde el Estado funcione como un conector entre los negocios.
Ocampo también considera que uno de los sectores que necesita una apuesta estratégica es la agricultura porque es un “sector que ha estado deprimido por décadas” y esto quedó evidenciado durante la pandemia del COVID-19, pues asegura que si hubiera espacios donde los agricultores puedan llevar sus productos para comercializarlos, muchos de ellos no habrían perdido su inversión y tampoco hubiese existido escasez en los mercados salvadoreños.
“El partido Vamos es el único en el que me sentí representada, el partido donde no fui apéndice de otras fuerzas políticas ya existentes, un partido que está conformado por ciudadanos que pasamos de la queja a la acción”,
“En esta pandemia la agricultura tenía que seguir porque la naturaleza sigue su ciclo natural. Si el Ministerio de Agricultura hubiese habilitado centros de acopio para los productores en puntos estratégicos en las entradas de ciudades, se habría podido apoyar a los agricultores más pequeños que tenían dificultades para sacar sus productos y para llegar al consumidor final. Luego se habría podido encadenar con las empresas que se dedican a la distribución de ese tipo de productos”, explicó.
Para el candidato, también es necesario trabajar en las instituciones estatales ya existentes y en reformas para garantizar que la legislación también contribuya al crecimiento y efectividad de negocios. El candidato aseguró que está trabajando en una propuesta para redefinir el trabajo de algunas instituciones como Conamype porque su trabajo actual está desfasado de acuerdo a la dinámica de la economía actual, por ello necesita una reforma para convertirse en “una incubadora y aceleradora” de empresas” que tenga como visión “convertir al país en una plataforma global de negocios”.
“Necesitamos una reforma de ley para convertir a Conamype en ese motorcito de negocios con esa visión y por su puesto priorizando los negocios del futuro como la agricultura pero dándole un valor agregado que la convierta en un negocio competitivo”, señaló.
Enfatizó que buscarán que el Estado invierta en negocios, no como un subsidio o capital semilla, sino como una inversión que se vaya a recuperar a medida que el negocio vaya creciendo.
Ley de agua y otras propuestas
Lissette Rivera, candidata a diputada suplente, comentó que otro de los ejes centrales del plan de trabajo que tienen como dupla es trabajar para la aprobación de una Ley de Agua. “Consideramos que el Estado es el más indicado para estar al frente pero también se puede hacer a través de un asocio público privado”, dijo.
El tema medioambiental también es clave en su plataforma. “El tema medio ambiental es un eje importante para nuestro partido, el desarrollo de nuestro país no puede estar desligado del cuidado y protección del medio ambiente. También se tratarán de impulsar nuevas propuestas como tratar de reducir el consumo de plástico”, manifestó la candidata.
“Vamos es un proyecto político a largo plazo, no somos una llamarada de tusa como otros proyectos políticos de hoy que quieren llegar a la Asamblea (...) Queremos liderar la oposición, una oposición que ha estado opacada y ha aprobado todo lo que le han pedido sin ninguna o pocas exigencias”,
Como parte de sus propuestas también está una revisión de la Ley de Adopciones para proponer reformas y garantizar que sea más funcional.
“La ley de adopción no es funcional, nosotros estamos revisando mucho esta ley para tratar que sea más funcional y para que los salvadoreños le apuesten puedan adoptar. Actualmente son procesos rigurosos que bloquean a las familias”, criticó Rivera.
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El plan de trabajo de la dupla se centra en tres ejes: económico a través del emprendedurismo; medio ambiente como principal apuesta una Ley de agua basada en un asocio público privado; y desarrollo social.
Defenderán los derechos de la población LGTBI+ siempre y cuando sean los derechos contemplados en la Constitución de la República y a los que tienen derecho todos los ciudadanos. No apoyan la petición del matrimonio entre personas del mismo sexo.
“Nosotros vamos a defender a cualquier salvadoreño y sus derechos, empezando por el derecho de la identidad, pero en el marco de lo que ya establece la Constitución de la República, no se le pueden negar los derechos fundamentales a nadie. La principal reivindicación que la comunidad LGTBI pueda tener quizás no sea el matrimonio, quizás sea el acceso a derechos como la salud, tener una vida digna”, dijo Ocampo.
No apoyan el aborto a través de las tres causales porque se “defiende la vida desde el momento de la concepción”. Consideran que quienes impulsan la aprobación del aborto lo hace como una solución a los abusos sexuales de niñas y mujeres, pero lo tachan de “una solución efímera” y para este problema una de las mejores soluciones sería tener una Ley de adopción funcional.
“La despenalización del aborto se hace a través de basicamente tres causales que ponen en riesgo la salud de la madre, pero también promoviendo mejores soluciones para la Ley de adopcion consideramos que no es necesario matar a un inocente. La vida de una personas así como la Constitución lo establece empieza al momento de la concepción no vamos a promover nada que vaya en contra de lo que nuestra Constitución establece”, dijo Rivera.