Este domingo pasado, la tenista española Carla Suárez volvió a las canchas para retomar los entrenamientos, apenas tres meses y días después de que anunciara una terrible noticia, que padece linfoma de Hodgkin, uno de los tipos de cáncer más fulminantes y veloces.
Sin embargo, la jugadora está luchando por mantenerse lo más estable posible mientras sigue un duro tratamiento.
Al poco tiempo de volver a las pistas en 2020, debido a diversas lesiones, a Suárez le detectaron el cáncer y, desde septiembre, anunció su baja del circuito.
Desde entonces, ha estado bajo tratamiento y se ha sometido a sesiones de quimioterapia. Sin embargo, las ganas de volver a las pistas, pese al deterioro en general que supone un tratamiento de esta naturaleza, no le han mermado y, tomando en cuenta que se encuentra relativamente estable, decidió regresar a los entrenos.
Eso sí, noticias sobre cuándo podría volver a competir de manera profesional no hay todavía, y eso es lo de menos, primero está su salud.
Fue junto a la italiana Sara Errani con quien se entrenó, y fue la misma Carla quien se encargó de anunciarlo con un video suyo entrenando a través de Twitter.
Si continúa su evolución de manera positiva, está previsto que en marzo finalice su tratamiento de quimioterapia. La atleta tenía previsto retirarse en 2020 del circuito y cerrar su carrera con los Juegos Olímpicos, que fueron postergados por la pandemia. Ahora, con todo lo que está viviendo, no hay claridad sobre sus planes a futuro, más allá de luchar por salvar su vida y de volver a las pistas.
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