“El partido no se termina hasta que el árbitro pita el final”, es una de las frases futboleras más tradicionales, pero no es muy seguido que se tenga que recurrir a ella porque pasó algo en el partido.
Pero esta vez sí se dio, fue en el encuentro correspondiente a la tercera fecha de la Primera Regional Valenciana, una liga semiprofesional en España, entre el Vinarós y el Peñíscola, donde a falta de segundos para el final, Carlos Aguayo, portero del Vinarós anotó un gol de buena factura desde fuera del área para el 1-1.
Toda la euforia se hizo sentir con los jugadores del cuadro vinarense, incluso hasta el portero, que no regresó a tiempo al área y vio cómo Marcos Cano, quien ya le había anotado en el tiempo normal, le repitió la dosis en el 90+6′ y le globeó el balón para que Peñíscola se llevara la victoria.
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Ese trágico desenlace hizo despertar en las redes la comparación con otro portero histórico y goleador, como es José Luis Chilavert, quien jugaba para el Real Zaragoza y anotara el 28 de enero de 1990 a la Real Sociedad desde el punto penal, pero exactamente en la siguiente jugada, aún en la tómbola central, Jon Andoni Goikoetxea le globeó el balón y se empataron las acciones. Lo mismo le pasó al portero salvadoreño Álvaro Misael Alfaro en un Firpo – Alianza hace algunos años.
Pero el tema no terminó allí, sino que el portero Aguayo fue protagonista de un contacto telefónico del programa Carrusel Deportivo de la Cadena SER de España, donde comentó parte de su insólito partido. “He hecho un Chilavert, era la tercera vez que subía en 2 minutos. Marqué el gol de mi vida pero me duró poco la ilusión”, aseguró.
Además, agregó las posibles causas del increíble empate, “cuando marcas un gol siendo portero… no sabes cómo reaccionar y eso pasó. Estaba mirando a las nubes, el delantero me conocía bastante bien, decide pegarle y la puso perfecta”, expresó.
El partido fue sumamente complicado, ya que hubo 21 tarjetas amarillas, tres expulsiones, una en el minuto 66 del Vinarós y dos del Peñíscola, una en el 86′ y otra en el tiempo agregado, según consigna La Vanguardia. El gol y su desenlace de todas maneras, ya pasaron a la historia del fútbol como muestra de cómo no se debe terminar un encuentero.