Lo que debía ser una fiesta terminó en desórdenes. Los Lakers de Los Ángeles se coronaron campeones de la NBA el pasado martes. La gente salió a la calle a celebrar, pero todo terminó muy mal.
El balance oficial de la policía de Los Ángeles reveló que hubo hasta 76 detenidos, más de 30 edificios sufrieron daños, 8 agentes policiales terminaron heridos y dos particulares más también, tras disparos de la policía.
Tras la vitoria del martes ante el Heat de Miami en el sexto partido de la serie de las finales de la NBA, todo comenzó tranquilo, pero pronto se convirtió en una ola de desórdenes que derivó en la intervención policial para apaciguar las cosas.
“Lo que comenzó como una celebración en gran parte pacífica del campeonato de la NBA de Los Ángeles Lakers en el centro de Los Ángeles, se convirtió en un comportamiento violento, destructivo y de confrontación”, se lee en comunicado del Departamento de Policía de Los Ángeles.
La mayoría de candidatos al premio Golden Boy son del Real Madrid y del BarcelonaSe estima que cerca de mil personas se reunieron en los alrededores del mítico estadio Staples Center, sede del equipo, después de la victoria por 106-93 para asegurar el título número 17 de la franquicia.
“Individuos rebeldes mezclados entre la multitud comenzaron a arrojar botellas de vidrio, piedras y otros proyectiles a los oficiales”, advirtieron. “Fue entonces cuando se declaró una manifestación peligrosa, y solo un número limitado de personas cumplieron y comenzaron a dispersarse”, agrega el comunicado.
Un hombre fue brutalmente golpeado y acabó en el hospital luego que supuestamente le escucharon decir algo así como “que le den a Kobe”, en referencia al jugador Kobe Bryant, ganador de cinco anillos de campeón y quien falleció en enero en un accidente de helicóptero junto a otras siete personas.
En las imágenes, también se observa a los policías disparando balas no letales, pero que generan un fuerte impacto en las personas y, al menos dos, resultaron con heridas.
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