Uno de los segmentos más gustados del programa “Viva la mañana” es el de cocina, en el cual la teleaudiencia tiene la oportunidad de aprender a preparar los más variados platillos.
Esta sección está a cargo del reconocido chef salvadoreño Roberto Menéndez, quien es graduado de una reconocida academia de gastronomía local.
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Durante los diez minutos que dura su presentación (divididos en dos partes) el experto en el arte culinario primero habla de los ingredientes y del proceso que realizará, luego realiza “el montaje” del platillo.
Según lo ha revelado, para él le resultaba un tanto complicado estar preparando la comida frente a las cámaras y a la vez conversar con la teleaudiencia. Pero ese inconveniente lo ha superado con el paso del tiempo.
La incursión de Menéndez en la televisión ocurrió en 2015 al participar en la primera temporada de “Top Chef El Salvador”, el programa que fue conducido por Marcela Santamaría. En dicho reality, Roberto resultó ser uno de los cuatro finalistas.
Tras su paso por ese programa, el joven cocinero fue invitado a formar parte de la tercera temporada, pero esta vez detrás de cámaras, como integrante del equipo de producción. Un mes después de estar en ese puesto los directivos del canal lo llamaron para proponerle el cargo de chef ejecutivo del canal, el cual aceptó con gusto.
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Posteriormente se incorporó al staff de presentadores de “Viva la mañana”. En esta telerevista matutina se le ve al lado de Luciana Sandoval, Andrea Mariona, Raquel Vargas, Alex Carranza, Mario Sibrián y Billy Calderón.
La admiración que muchas personas sienten por el chef Roberto es expresada en su cuenta personal en Instagram y en la del programa, donde se comparten imágenes en las que se le ve trabajando o posando como todo un modelo profesional.
Es en esas fotografías donde expone su imborrable sonrisa, su barba poco poblada, sus ojos vivaces y sus brazos cubiertos de tatuajes artísticos. Son precisamente esas cualidades físicas las que más llaman la atención de sus seguidoras.
“Esos ojitos”, “Siempre guapo nunca inguapo, chef”, “¡Cosita bella! ¡Cosita bien hecha! ¡Te amo!”, “Quisiera ser alcohol para evaporarme en tu interior”, “Chulo como siempre”, son algunos de los piropos que le dicen al joven chef y padre de familia.
