Luiza Manga: “He logrado quitar el mito que el yoga es suave y relajante, demuestro que hay niveles exigentes”

Una década practicando yoga le ha permitido a la influencer amar esta práctica, ejercerla con disciplina, llevarla a todos los aspectos de su vida y formarse académicamente al respecto.

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Manga es amante de un estilo de vida saludable. Foto Instagram mangaluiza

Por Diana Orantes

2020-09-15 3:41:01

La influencer Luiza Manga está empapada de todo lo relacionado con el yoga, una disciplina que practica con destreza desde hace 10 años y que le ha generado bienestar, salud y mucha felicidad.

En una entrevista con El Diario de Hoy habló de cómo llegó a esta práctica, qué la continúa motivando y cuáles son sus posturas favoritas, además conversó sobre el entrenamiento funcional al que está sometida y su vuela al ciclismo.

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Manga se define como una amante de la actividad física. A los 19 años empezó a hacer ejercicio en el gimnasio. “El ejercicio me hace sentir bien, es un nivel de satisfacción tan grande que me genera, es muy placentero, lo principal son los efectos en la salud tan positivos como respirar bien, saber que si me enfermo será menos grave, al final de cuentas también me ayuda mantener la figura”, explicó.

Emocionalmente le permite ser feliz y le ayuda a tener energías para cuidar a su hija de seis años. “Estar con ella requiere mucha energía, por eso también me entreno y me cuido muchísimo por ella”, intervino.

Llegó al yoga por influencia de su hermana que trabaja como nutricionista.  “Al principio lo hacía solo como parte de una rutina de ejercicio, luego me incorporé más y ahora he alcanzado un nivel más espiritual“, puntualizó.

Además de practicar, Manga estudia yoga a partir de filosofía e historia. Foto EDH / Instagram mangaluiza

Actualmente estudia para convertirse en profesora de yoga. “Quería ir más allá, me gusta saber el por qué de las cosas. Cada postura tiene un efecto no solo en los músculos, sino en las sensaciones”, aclaró. No descarta impartir clases en algún momento. “Hay gente que se siente muy identificada conmigo y me preguntan cómo empezar. He logrado quitar el mito que el yoga es suave y relajante, demuestro que hay niveles exigentes”, agregó.

Con el estudio se ha adentrado a conocer a los filósofos e historia. “Si llego a ser maestra, qué bien, pero si no, me quedo con todo ese conocimiento”, subrayó.

La influencer demostró algunas posturas e hizo recomendaciones

Ama el yoga porque es totalmente diferente a las demás actividades realiza y los beneficios para su cuerpo son evidentes en cuanto a la flexibilidad, fuerza y equilibrio. “El yoga no es solo una hora de práctica diaria, lo llevo a mi familia, el trabajo, la forma de enfrentar la vida, cuidar el medio ambiente”, reveló.

Sus posturas favoritas son el triángulo, el cuervo, paradas de cabeza y en general los balances de brazos. “También tengo posturas que llevo diez años practicando y todavía no me salen, pero no pasa nada, es parte de nuestro cuerpo material que es súper limitado, ya que hay que respetar los propios límites. En cambio hay otras muy difíciles que sí se me dan”, mencionó.

Flexibilidad, fuerza y equilibrio es lo que ha reforzado la influencer con el yoga. Foto EDH / Instagram mangaluiza

Por otro lado, recibe clases de entrenamiento funcional en línea y le dedica 30 minutos tres veces a la semana, porque no es su fuerte.

“De lunes a sábado trato de hacer yoga, los lunes, miércoles y viernes el entrenamiento funcional”, indicó. Este último incorpora cardio y ejercicios de fuerza. “La bicicleta la practico dos o tres veces por semana y una vez son salidas largas al volcán”, añadió.

De la mano, Manga lleva una rigurosa alimentación aunque “como un montón”, dice, “pero medido”, aclara.

“Los fines de semana como lo que se me antoje, pero de lunes a viernes peso cada ración de comida, mido los carbohidratos, trato de no tomar alcohol (es la parte que más me cuesta, porque si tomo al día siguiente no me levanto con las mismas ganas de ejercitarme)”, aseguró.

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Debido a que tuvo muchas etapas en las que fue muy estricta a la hora de comer se sintió socialmente limitada. “No la pasaba bien, hasta tuve problemas con el novio, pero me relajé y ahora sé comer con apoyo de mi hermana. Trato de balancear y comer proteína sino me pongo muy flaca”, dijo.

Pese a controlar la ingesta de frutas y verduras, los sábados y domingos están abiertos a otras delicias culinarias como quesos, jamones o alguna cerveza.

“Un estilo de vida saludable, el ejercicio, el contacto con la naturaleza y la alimentación sana tienen tantos beneficios que no solo se queda en una apariencia agradable, sino en una forma de ver la vida. Todo parece diferente porque liberamos tantas endorfinas, hormonas de placer, que andamos más felices y emocionalmente se nota hasta para relacionarnos con los demás”, subrayó.