Criminóloga revela cuál es la principal adicción de “El Chapo” Guzmán

El narcotraficante que admitió tener 23 hijos reconocidos tiene un narcisismo marcado, pero no es un psicópata.

La criminóloga Mónica Ramírez Cano entrevistó al ex líder del Cártel de Sinaloa

Por N. Hernández / Agencias

2020-09-09 9:50:51

La criminóloga Mónica Ramírez Cano perfiló en 2016 a Joaquín el Chapo Guzmán Loera y este martes publicó en su cuenta de Twitter un video inédito donde le pregunta: “¿Cuáles son sus adicciones?”.

El fundador del Cártel de Sinaloa responde: “Ninguna, mi única adicción son las mujeres”.

Afirmación que puede ser creíble teniendo en cuenta que ha confirmado que tiene 23 hijos reconocidos y conociendo su historial de aventuras amorosas.

La experta asegura que el Chapo tiene un narcisismo muy marcado, pero no puede clasificarse como psicópata.

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“No es un psicópata. Tiene rasgos psicopáticos y rasgos narcisistas que se reflejan en una necesidad de admiración, de sentirse único y especial”, dijo Ramírez.

También relató a Infobae que no es un sujeto que sea muy inteligente porque su “IQ es normal”, pero fue talentoso en su oficio, según la opinión de la experta, quien explicó que el capo se cree un “empresario” que encontró un área de oportunidad por la vía de la ilegalidad.

“Lo que tiene es una capacidad estratégica muy importante. Sabe a quién poner en el lugar preciso, a quién quitar y cómo mover sus piezas, como en un juego de ajedrez”, manifestó.

Ramírez Cano señaló que tiene un rasgo de personalidad que lo hace respetuoso del matriarcado, una influencia muy marcada por su abuela y su madre, Consuelo Loera.

“Es una persona respetuosa, cuida mucho las formas, cordial, amable, muy reservada, pero cuando entablas confianza puedes platicar con él de manera extraordinaria, lo que te permite saber cómo opera su mente”, expuso.

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Según la experta, a diferencia de otros capos que tienden a personalizar más el ejercicio de la delincuencia y que cometen actos atroces de violencia, Guzmán Loera es un capo de la vieja escuela que respeta la palabra y considera que el peor delito que puede existir es el secuestro, puesto que el narcotráfico existe porque la gente elige consumir drogas.

A Ramírez no le resulta inquietante la personalidad del capo, pues está acostumbrada a entrevistar asesinos para perfilarlos.

Asegura que su profesión no le permite sentir miedo, pues si fuera así no tuviera el valor para sentarse frente a los criminales más peligrosos de su país.

“Si yo tuviera el miedo de la gente común que no está metida en esto, no podría estar sentada enfrente de personas que han cometido delitos gravísimos y que han dejado una herida muy profunda en nuestra sociedad”, dijo.

Entre otros narcotraficantes a los que ha entrevistado, además de al Chapo y a Miguel Ángel Treviño Morales, Z-40, ex líder del cártel de Los Zetas, están Servando Gómez Martínez, la Tuta, líder de Los Caballeros Templarios, y Dámaso López Núnez, el Licenciado, del Cártel de Sinaloa, así como a decenas de asesinos seriales.

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