El esfuerzo y lucha de los atletas salvadoreños que combaten el Covid-19 trabajando en salud

Deportistas con una profesión de salud han cambiado sus uniformes de entrenos y competencias por los de servicios médicos. Han priorizado dedicarse a enfrentar el coronavirus por el bienestar de la población, a pesar de estar expuestos a la enfermedad

descripción de la imagen
El odontólogo Juan Carlos Ramírez (der.), en la labor contra el Coronavirus. Es también dirigente del atletismo salvadoreño. / Foto Por Cortesía Indes

Por Indes / Varinia Escalante

2020-05-29 5:00:43

No hay tarea chica respecto a la salud. Mucho menos en estos tiempos, en los que la pandemia por el coronavirus (Covid19) afecta al mundo entero. Sin embargo, en primera fila está el personal sanitario nacional, enfrentando la enfermedad y cuidando a la población. Y, no muy alejados, están los deportistas salvadoreños con profesiones dedicadas a la medicina.

Galenos, odontólogos y enfermeras, los atletas y dirigentes se han quitado sus uniformes deportivos para enfundarse las gabachas, las mascarillas y los trajes de bioseguridad para combatir el virus. No importa de qué deporte sean, todos ahora sudan por igual, echando mano de la disciplina deportiva, y peleando por ganar una misma batalla.

Médicos, ante todo

El ciclo olímpico para algunos, por ahora, está centrado en prepararse para competir en un preolímpico. Para otros, se enfoca en entrenarse de cara a los próximos C.A. Sin embargo, para una minoría, lo que hace más de dos meses era una simple rutina atlética, ahora es secundario.

La pandemia ha obligado a cuatro atletas a poner en prioridad sus profesiones y a trabajar como médicos. Se trata de Mario Guillermo Sandoval, judoca y ginecólogo-obstetra; José Mario Olmedo, fisicoculturista e internista; Juan José Rivas, luchador y médico general; y José Javier Handal, tirador deportivo y futuro cirujano. Todos están en hospitales, buscando combatir el coronavirus.

José Mario Olmedo (der.), fisicocultirista y doctor en el Hospital Nacional de Santa Ana.

Sandoval labora en el 1º de Mayo del ISSS. No obstante, sufrió el contagio por el Covid19, y tomó todos los resguardos exigidos para poder seguir adelante. “Fui asintomático. No presenté ninguna complicación. Pero el tener que darles a tus familiares y personas cercanas esa noticia, y saber el estrés que esto va a generarse, la preocupación que les provocas, creo que ha sido lo más difícil”, contó.

El judoca no quedó excluido de pasar a cuarentena y ser recluido en la domiciliar. “Por el momento, lo más importante es la salud y continuar atendiendo pacientes. En nuestro caso, como médico obstetra, a embarazadas de alto riesgo. Esa es la prioridad”, puntualizó el galeno, quien da clases teóricas de judo en una plataforma virtual.

Mira también:

Escupir en la cancha no sería sancionado según FIFA

La última recomendación de la entidad rectora del fútbol es que las medidas a tomar para reducir el riesgo del contagio de Coronavirus no pasa por la amonestación

Por su parte, el físico Olmedo tiene 20 años de ejercer la medicina interna y está en el área de emergencias del Hospital Nacional de Santa Ana. “Cada dos semanas, me encuentro en el área crítica, cubro también servicios de hospitalización. La situación es bastante delicada, no solamente (cuando llega) algún paciente en condición crítica, sino también en que se debe manejar el nivel de ansiedad y angustia que toda la población vive”.

Por su parte, Rivas y Sosa no quedan de lado en sus labores. El luchador está en el área de Emergencia del Hospital Rosales, y aseguró que la mayor dificultad es la falta de conciencia de la población respecto al seguimiento de las indicaciones de prevención del virus. Además, contó que entrena en su hogar. “Como todo deportista, tenemos que ser polifacéticos, y ahora entrenamos desde casa en nuestros momentos libres y trabajamos en nuestra profesión. Eso nos da otra satisfacción”, mencionó Rivas.

Y el tirador es estudiante de séptimo año de medicina, realiza su año de internado en el Hospital San Rafael, de Santa Tecla. Sus padres son mayores de 60 años, por lo que se ha ido de casa para no arriesgarlos a un posible contagio, sobre todo porque ha tenido contacto con casos sospechosos y positivos al Covid19.

“Tuve que mudarme de mi casa para tratar de no poner en riesgo a mi familia, y tuve que venirme a vivir con otros compañeros de la misma carrera”, explicó el atleta Handal.

Entérate:

Visto bueno para que en Italia vuelva el fútbol

La Serie A ya tiene el aval para que la número 5 ruede de nuevo a partir del próximo mes

Los dientes, otra prioridad

No porque se trate de algo estético, sino por una emergencia, también los odontólogos están trabajando con riesgos en medio de la pandemia; y de igual forma, están al auxilio de lo que los demanden. Juan Carlos Ramírez, presidente de la Federación Salvadoreña de Atletismo (Fedeatletismo), y Ricardo Fabricio Rodríguez, quien practica paracaidismo, prestan su ejercicio en unidades de salud.

El dirigente está en la del Barrio Concepción, y es parte del equipo de trabajo del Ministerio de Salud (Minsal), realizando campañas de vacunación en la capital. Mientras que el atleta pertenece a la Unidad Médica de San Miguel.

“Estamos atendiendo emergencias odontológicas, con pacientes que llegan inflamados, con dolor. Pero también, he rotado en centros de contención, en apoyo administrativo en pacientes y personas que han estado cumpliendo su cuarentena”, informó Ramírez.

“Como médicos, nos preocupa, porque somos la primera línea de defensa ante estas situaciones y tenemos que tener el cuidado necesario de ocupar todas las medidas de bioseguridad que se requieren, para estar en contacto con personas que puedan estar contagiadas con este virus”, detalló el titular del atletismo, quien no ha dejado tampoco su faceta dirigencial.

Por su parte, Rodríguez comparte criterio con su colega y considera el mayor temor es el posible contagio a sus familias, pero esto no los detiene para apoyar a los que los necesitan. “Lo crítico para muchos es el impasse laboral y el alejamiento familiar, así como no poder desarrollar actividades deportivas que nos mantienen en equilibrio y armonía”, dijo.

Las enfermeras Jenny Guevara (arriba), Karla Ortiz (abajo) y Merari Alvarenga (der.).

Las enfermeras judocas

Los judogis (vestimentas de judo) están guardados para tres enfermeras. Sus ocupaciones primordiales ahora son trabajar con el personal sanitario del país. Se trata de Merari Yareni Alvarenga, Karla Venecia Ortiz y Jenny Ester Guevara.

Alvarenga, del área de pediatría del ISSS de Ilopango, fue expuesta al virus y tuvo que pasar el proceso de protocolo para descartar que estuviera enferma. “Esos días fueron importantes para mí, y creo que marcarán mi vida. Mi familia me hizo sentir su apoyo y me motivaron a sentir que inyectaba fe a mi vida, confiando en que Dios es quien tiene el control”, consideró.

No te pierdas:

El Real Madrid perdió la cabeza

El club merengue ofrecerá hasta cuatro jugadores, incluido James Rodríguez, a cambio de uno de la Premier League

“Lo más difícil que he experimentado en esta pandemia ha sido la discriminación y la poca valoración a mi profesión. He sentido que, al estar expuesta, en vez de recibir apoyo de las personas, (estas) han tenido actitudes de desprecio y rechazo”, reconfirmó.

En la misma línea de perseverancia y compartir el orgullo por el judo, están Ortiz y Guevara. La primera trabaja en la Unidad de Salud Especializada de San Martín, y es voluntaria de su comunidad. Acepta que lo más difícil es recibir a personas sospechosas o positivas, pero el amor a la profesión está por encima del miedo.

“Soy parte de un gran equipo, que no nos importa la hora, el cansancio o el clima, pero sabemos que esta ayuda va llegar a muchas familias de nuestra comunidad”, comentó.

Mientras la santaneca Guevara está en la Unidad de Salud Sitio del Niño, Santa Ana, y complementó: “Es preocupante ver que la población no acata las indicaciones dadas por el Gobierno y el Ministerio de Salud, y ver cómo aumenta el número de fallecidos. (…) Para mí, primero hay que salvar las vidas”.

Lo más destacado:

El fútbol en El Salvador podría volver en un máximo de cuatro meses

El presidente del INDES, Yamil Bukele explicó en Los Provocadores que aún falta tiempo para que el fútbol pueda reiniciar en el país, aunque hay discusión en la Asamblea Legislativa para que sea dentro de 60 a 90 días