“Existen ‘chucos’, mal intencionados y marrulleros, hay que hacer diferencia entre estos ‘tipos’ de jugadores, no nos confundamos”, dijo un oyente este jueves en el programa de Los Provocadores. El arte de ablandar futbolistas, explicado maravillosamente por Ramón Fagoaga -exfutbolista de Atlético Marte y la Selecta- fue un arte popular que inspiró supervivencia a muchos profesionales del balompié en nuestro país.
Hoy queremos compartir algunos nombres que salieron a bailar, o más bien a serruchar, en la cancha de El Diario de Hoy. La gente se volcó a responder sin pensarlo dos veces ¿Cuál ha sido el futbolista más “chuco” que has visto jugar en la Liga Mayor de Fútbol?
La gente tiró varios nombres, y muy pocos se pusieron de acuerdo. La mayoría defendió lo que vio, mientras que otros no solo decidieron elegir tras ver, sino también exaltaron la brusquedad de sus elegidos por ser sus contemporáneos. Por ejemplo, la mayoría que nombró a “eminencias” setenteras u ochenteras no se movieron de la época para dar más nombres, mientras que los más contemporáneos no tenían ni idea de los auténticos pioneros.
Uno de los primeros nombres fue el de Luis Anaya, famoso por sus polémicas y pintorescas declaraciones. Anaya en un partido ante Guatemala llegó a proceder de tal manera que el color de la tarjeta se quedaba corto, pegó patadas como si su vida dependiera de ello. Ex FAS y ex Águila, probablemente uno de los últimos grandes expositores del juego mal intencionado.