El tema económico no ha sido ajeno, en todos los procesos, a los seleccionados de fútbol playa. Pero ahora, en plena pandemia por el coronavirus (Covid19), varios jugadores tienen dificultades económicas, ya que sobrevivir a la cuarentena domiciliar los aleja de llevar el sustento a sus hogares.
El vivir de la pesca es la preocupación de ellos, porque no tienen otro ingreso para subsistir. Esto porque, primero, de conseguir pescar no pueden vender el producto; y, segundo, al no poder salir de casa, tampoco pueden ir en sus lanchas o utilizar las herramientas de sus patronos para realizar sus labores.
En ese grupo de afectados se encuentran Exon Perdomo, Elmer Robles y Darwin Ramírez, los primeros dos de la isla San Sebastián, en Usulután; y el último de la Barra de Santiago, en Ahuachapán. Estos seleccionados, incluso, contaron que se terminaron sus “ahorritos”, para poder frenar la crisis financiera.
Sin embargo, aceptaron que el estímulo económico que recibieron, hace 12 días, por parte de Indes -el primero que les entregan en el año- les ha ayudado a paliar la crisis, y llegó justo a tiempo. “Lo agarramos casi solo para pagar deudas, para pagar en tiendas, y dinero que debía. Esperando con la fe de ese pisto, uno se enjarana para prestar para comer, y sirvió solo para pagar la jarana”, expresó Perdomo.