Luego que el presidente Nayib Bukele anunció que 100,000 familias recibirían el subsidio de $300 este sábado, una avalancha de consulta hizo difícil acceder al servicio en internet. Los que sí lograron hacer la consulta se fueron a las agencias bancarias a formar extensas colas, pero les informaron que no tenían dinero depositado. Frustración, tristeza e incertidumbre afloraron en los rostros.
Los ciudadanos optaron por ir a las oficinas de Cenade, para hacer al consulta, pero estaban cerradas y deberán regresar el lunes. “María, sí eres beneficiario del apoyo económico de $300 para alimentación de tu hogar”, ese es el mensaje que le apareció a María Guillén, de 50 años de edad, después que ingresara su número de DUI en la plataforma emergencia.covid19.gob.sv; tal como lo indicó el presidente Nayib Bukele el viernes 27 por la noche; sin embargo, al llegar al banco la cajera le dijo que no había dinero en su cuenta.
“Me salió que sí soy beneficiaria, pero al venir al banco me dicen que no hay, porque dice que quizá no ha llegado (el dinero), pero no han depositado y como el presidente dijo que a partir de ahora lo viniéramos a traer, pero no; tenemos tres semanas de no vender, no sé cómo voy a hacer”, comentó con tristeza María, quien es madre de cuatro hijos.
María llegó temprano a hacer cola al banco pero en su cuenta solo le aparecían los mismos $24 que dijo ha estado guardando durante semanas, porque es lo único que tiene.
La historia de María es similar a la de muchos salvadoreños que no pudieron cobrar el subsidio.
José Martínez, taxista, también mostró su insatisfacción, ya que al llegar a la agencia del banco en el que tiene una cuenta corriente le dijeron que en esa sucursal no podía hacer efectivo el retiro.
“Se supone que es en todos los bancos para poder responder a toda la gente, pero me acaban de decir que aquí en esta agencia no, pero yo voy a seguir haciendo la fila, me están mandando para otro lugar, pero igual uno no puede andar en cualquier lado”, manifestó Martínez.
José Luis Zelaya llegó a otra agencia a ver sí desde ahí le podían decir si podía ser beneficiario, porque no pudo ni siquiera entrar a la plataforma.
“Mire, primero dijeron que era por el recibo de la luz, luego que por el subsidio al gas, pero esto no les va a funcionar, porque el dueño del mesón es el que tiene el recibo, entonces el favorecido será él y los que viven dentro del mesón nada. Esto está difícil, porque además hay muchas personas que no tienen teléfonos con redes sociales y que no pueden entrar a la plataforma”, expresó Zelaya, quien dijo tener un negocio propio.
El comerciante opinó que el gobierno hubiera buscado otros métodos para asegurar que el subsidio llegue a las manos que más lo necesitan y que se hubiera apoyado con datos de las alcaldías y del Seguro Social.