Pescadores reportan pérdidas por fuertes vientos

Las pérdidas oscilan entre los $50 y $100.

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Foto EDH / Insy Mendoza

Por Insy Mendoza

2020-03-02 4:00:35

LA UNIÓN. Los vientos intensos con velocidades entre los 20 a 40 kilómetros por hora, y ráfagas entre los 50 a 75 kilómetros por hora, registrados desde el pasado jueves 27 de febrero a nivel nacional, provocaron la suspensión de las faenas de pesca artesanal en las comunidades costeras del departamento de La Unión.

Cuando hay presencia de fuertes vientos, estos provocan oleajes fuertes en la bahía y El Golfo de Fonseca y provocan que las embarcaciones corran el riesgo de darse vuelta con lo que llevan a bordo.

Ninguna embarcación salió a pescar durante cuatro días, aseguraron los pescadores artesanales de las comunidades de los municipios de San Alejo, Conchagua, Meanguera del Golfo, todas de La Unión.

Las pérdidas económicas oscilan entre los $50 a $100 diarios por cada pescador artesanal. Además, de las personas que se encargan de bajar y subir las hieleras y los motores a las lanchas, y las vendedoras de mariscos.

La única alternativa de emergencia que tenían los pescadores antes de ocurrir la mortandad de los moluscos el pasado 12 de noviembre de 2019, era que, durante la marea seca, se iban a los esteros del frente de la bahía de La Unión a extraer cascos de burro, curiles y almejas para el consumo y otra para la comercialización.

Mártir Pérez, presidente de la asociación cooperativa de pescadores de El Conchillal, del cantón Huisquil, de Conchagua, dijo que cada vez es más preocupante la situación económica para los pescadores. “Antes cuando no podíamos salir a pescar por los fuertes vientos, la gente lo que hacía era irse a sacar moluscos para llevar la comida a la casa, y una parte para vender; pero hoy estamos sin esa alternativa”, agregó.

Pérez dijo que es lamentable que las instituciones del Estado y las municipalidades no cuenten con un plan de contingencia para ayudar al sector de la pesca artesanal para cuando hay tiempos de la suspensión de la pesca o la disminución de los recursos causado por los fenómenos naturales.

“En estos cuatros días sin salir a pescar la gente lo que está haciendo es endeudarse más en las tiendas porque no tienen nada de alimentación que darles a los niños, y eso es una tristeza e indignación”, agregó Pérez.

Walter Viera, otro pescador del sector Campo Villalta, de La Unión; dice que en la comunidad la mayoría suspendió labores de pesca desde el miércoles que empezaron hacer presencia los vientos, “hoy domingo nos estamos preparando para salir a pescar el lunes, esperamos que no hayan vientos”, agregó.