El 67 % de los habitantes del municipio de San Marcos, al sur de San Salvador, considera que la contaminación del agua es el principal problema ambiental que sufre el municipio, de acuerdo con la reciente Encuesta de Calidad de Vida del observatorio ciudadano El Salvador Cómo Vamos, presentado ayer por su coordinador, Mario Chávez.
Con el apoyo de Fusades, USAID y Glasswing, además de instituciones cooperantes, la encuesta también resalta que más de la mitad de los hogares de ese municipio reciben el servicio de agua potable por cañería sólo algunos días a la semana.
Por su parte, Chávez destacó que si bien 95 de cada 100 familias tiene el sistema de agua potable en sus hogares, no todos la reciben todos los días. “Eso afecta la calidad de vida de las personas. No hay que ver las cosas como un elemento de cobertura, hay que ver la calidad del servicio que se está dando”, manifestó.
Esta muestra fue tomada, eso sí, antes de la crisis del mal olor, color y sabor del agua potable, que ha llevado a la Asamblea Legislativa a la interpelación de los titulares de Anda y el Ministerio de Salud.
El estudio de El Salvador Cómo Vamos fue presentado ante autoridades municipales y algunos residentes, y el mismo registra aspectos tanto negativos como positivos de ese municipio a través de la medición de más de 10 indicadores de calidad de vida como salud, migración, educación, seguridad, vulnerabilidad, servicios básicos, espacios públicos, entre otros.
Para Raúl Cabrera, síndico municipal, la encuesta es una “fotografía del momento en que se tomó”, sin embargo “como funcionarios públicos lo que nos deja es un reto: las cosas que están bien, qué bueno, pero creemos que las cosas que están señaladas que falta por hacer es en lo que debemos enfocarnos”.
Entre los aspectos de la comuna que salen bien evaluados están la recolección de desechos y la construcción de parques y zonas verdes. “Eso es producto del trabajo que hace la institución, pero también de la fiscalización que hacen a diario los ciudadanos”, dijo Cabrera.
El coordinador de El Salvador Cómo Vamos, por su parte, dijo que este año volverán a realizar una medición para determinar en qué aspectos se ha avanzado o retrocedido con respecto al 2019, cuando se realizó la primera encuesta.
El sondeo también aporta datos sobre le intención de migrar por parte de los marquenses. Un 29 % de ellos dice haber pensado en irse a vivir a otro país.
“En 3 % de los hogares alguno de sus miembros ha intentado migrar a otro país y en el 1 % alguno de sus miembros ha sido deportado en el último año”, señala el informe.
El panorama en educación
Algunos de los datos de la encuesta también advierten que el promedio de escolaridad de los habitantes de San Marcos es de 8.9 años, y la mayor asistencia escolar está entre los niños de 7 a 15 años de edad.
Asimismo, de cada 100 jóvenes entre 16 y 18 años que deberían estar inscritos en bachillerato, sólo 52 lo están. El resto, o no está cursando ningún nivel educativo o está cursando el anterior.
Por otra parte, 61 de cada 100 niños y jóvenes que se encuentran estudiando lo hacen en el sistema educativo público. Ya en la zona rural, la asistencia a escuelas públicas sube a 70 de cada 100.
El objetivo de la medición de El Salvador Cómo Vamos se basa en cinco aspectos fundamentales: activos de personas, hábitat, cultura y responsabilidad ciudadana, buen gobierno y desarrollo económico y competitividad.
La encuesta fue realizada entre el 26 de julio y el 25 de agosto de 2019, con una muestra compuesta por 839 entrevistas hecha cara a cara a un miembro mayor de 18 años por cada familia, “de estratos sociales bajo, medio y alto, y residentes habituales” en el municipio.