La paciencia premió a Águila con los tres puntos, con la victoria sobre Santa Tecla (1-0), los séptimos en tres partidos, con el que llegan a nueve y aparecen en los primeros puestos. Los periquitos seguirán siendo el único equipo sin ganar y últimos en la tabla.
Partido atípico en el estadio Barraza, sin la presencia de aficionados, por la sanción que debió pagar Águila, impuesto por la Comisión Disciplinaria de la Fesfut, por la reincidencia del ingreso de pólvora.
Al no contar con público, los emplumados omitieron los actos protocolarios. En las gradas del sector de platea se ubicaron los medios de comunicación, algunos dirigentes de ambos equipos, integrantes de las reservas y los policías.
En las afueras del estadio, en un kiosko, se reunieron algunas personas identificadas con los colores del negronanja, para ver el partido por la televisión, tratando de estar lo más cerca posible del equipo, aunque hasta la cancha no se oyera nada del apoyo que hacían.
El silencio en las gradas facilitó escuchar todo lo que se dijo en la cancha, que entretenía más que el mismo partido, en el primer tiempo. Desde regaños entre mismos compañeros, también los del cuerpo técnico y los árbitros a los jugadores, y las respuestas de estos. Además, los insultos entre rivales, para tratar de intimidar.
Si no fuera por estos detalles, el primer tiempo pasa desapercibido en el estadio Barraza, con dos equipos que generaron poco fútbol. Mucho juego de media cancha, con varios balones imprecisos y mucha pierna fuerte. Con poca diferencia, Santa Tecla tuvo más dominio de pelota, pero los orientales con las mejores ocasiones para anotar.