Una reciente encuesta de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) reveló, a 28 años de firmados los Acuerdos de Paz, que el 48 % estuvo muy de acuerdo o de acuerdo con que en algunas circunstancias un gobierno autoritario puede ser mejor que un gobierno democrático.
Este dato sorprendió a dos firmantes de la paz, quienes durante el conflicto estuvieron en lados opuestos, pero ahora coinciden en que es un riesgo perder libertades individuales frente a un régimen autoritario.
El estudio fue realizado a 1,265 personas por el Instituto Universitario de Opinión Pública (Iudop) de esta casa de estudios, donde se observó que los salvadoreños están interesados en los asuntos políticos del país, y que son conscientes que parte de la democracia es poder participar.
“La población considera, mayoritariamente, casi 6 de cada 10, que El Salvador es un país democrático, y la satisfacción con el funcionamiento de la democracia está dividida: un poco más del 50 % está muy satisfecho o algo satisfecho, y el 47. 5 % está poco o nada satisfecho”, explicó el padre Andreu Oliva S.J., rector de la UCA.
El estudio midió también “las tendencias autoritarias”, en donde un 50.5% está “de acuerdo o muy de acuerdo” con que las autoridades usen la fuerza si hubiera huelgas o protestas que causaran desorden en el país.
La población también está de acuerdo o muy de acuerdo, en un 81. 8 %, en que el Gobierno es el principal responsable de mantener la democracia en el país, y en un 48.7 % piensa que es necesario sacrificar algunos derechos de los salvadoreños para alcanzar el bienestar de la sociedad.
Además, un 76.6% está a favor de que las autoridades gobiernen “con mano dura” y un 85.6 % indicó que el país funciona mejor si hay autoridades fuertes.
Pese a esa división de opiniones, el rector de la universidad dijo que la población sí admite que la democracia es la mejor forma de gobierno, donde casi 9 de cada 10 lo afirman.
“Esto es importante porque se nota que a lo largo de estos años, la población ha visto y afirmado que quiere un sistema democrático. Que hay que perfeccionarlo, que tiene todavía muchos problemas, pero a pesar de ello, es la mejor forma de gobierno y esto lo señala el 87 % de la población”, sentenció Oliva.
Al respecto, la diputada del FMLN y firmante de los Acuerdos de Paz, Nidia Díaz, consideró que la ruta que se debe seguir es la comenzada con los mismos acuerdos que permitieron, recuerda, alrededor de 37 reformas a la Constitución para precisamente defender las libertades individuales que en las épocas de los gobiernos autoritarios eran coartadas.
“Creo que los tiempos de gobierno autoritarios ya pasaron. Precisamente una de las causas que provocó el levantamiento del pueblo fueron los métodos que inhibían las libertades de movimiento, de opinión, de propuestas. Había intolerancia, la gente tuvo que luchar mucho para hacer una reforma que permitiera actuar como sistema democrático de derecho, donde hay contrapesos, balance. En esa ruta debemos seguir”, valoró la ex combatiente.
Si bien consideró que todavía la democracia del país necesita avanzar, cree que es momento de pasar a otro estadio de avances.
“Han pasado 28 años de los acuerdos y tenemos retos de perfeccionar la democracia, hacerla más participativa. Al contrario del autoritarismo, abrir espacio a los ciudadanos para que opinen es un déficit porque no tenemos referéndum ni revocatoria de mandato a medio término y que la gente decida”.
Para la farabundista es también momento de avanzar en la transparencia del Estado.
“Necesitamos avanzar en un Estado transparente, ese rumbo llevamos y no puede ser que retrocedamos aunque hay amenazas y riesgos. Y necesitamos cultivar la memoria histórica”, añadió.
En un sentido similar se expresó el diputado de ARENA, militar en retiro y firmante de los Acuerdos, Mauricio Ernesto Vargas: “Quien no ha vivido o leído la historia correctamente podrá querer cualquier cosa. Lo más preciado que puede tener un país es la libertad, tiene que tener un republicanismo que en un momento determinado mantenga la separación de poderes y los pesos y contrapesos”, dijo.
Respecto a los resultados del sondeo, el militar en retiro reaccionó que “respeto pero no comparto y lamento que se no se investigue (los problemas del autoritarismo en el pasado), podemos llegar a caer en un retroceso y las consecuencias tendríamos que afrontarlas”, dijo.
Derechos de la población
En cuanto a la libertad de expresión como derecho humano, Oliva manifestó que hay avances en este tema, según lo manifestado por los salvadoreños, ya que 7 de cada 10 lo afirmaron y existe una gran satisfacción a comparación de otros derechos como la justicia, donde las personas indican que están insatisfechas.
Según la encuesta, la justicia fue una de las peor evaluadas. Los resultados muestran que un 55 % piensa que está igual o ha empeorado, además de que no se están respetando los derechos humanos como se esperaba luego de la firma de los acuerdos, un dato que ha tenido la misma tendencia en estudios anteriores de la Iudop, dijo Oliva.
Otro aspecto es el respeto a las leyes por parte de los funcionarios gubernamentales, donde 7 de cada 10 personas piensan que no ha habido mejora.
Según el rector de la UCA, por parte de la población existe un gran cansancio respecto al sufrimiento que causa la violencia y la criminalidad, lo cual los lleva a tomar decisiones desesperadas o a querer soluciones desesperadas como la eliminación de los grupos de personas que representan una amenaza a la sociedad.
Excesos en la Asamblea
Oliva criticó que en El Salvador instituciones como la Asamblea Legislativa operan con altos costos alto debido a la cantidad de empleados que tiene sin realmente necesitar.
“Muchos de ellos ni siquiera realizan ninguna función. En realidad el costo de la democracia, si no tuviéramos estos excesos, como el que tenemos en la Asamblea Legislativa, no tan alto”, opinó. Además, el rector de esta casa de estudios manifestó que el número de empleados debería ser proporcional a la cantidad de legisladores existentes.