La lucha del gran francés Voltaire contra la censura y el terror

La nueva modalidad en el mundo son los linchamientos vía troles: se detecta cuando las alabanzas en favor de un funcionario empalagan, como asimismo ensucian a opositores acusándolos de lo que sea. Estamos peligrosamente cerca de hundirnos en trolecracias

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Foto: Internet

Por El Diario de Hoy

2020-01-23 7:49:59

En su Cándido, Voltaire, el gran y noble pensador francés, relata la frecuencia con que los tatas curas de su tiempo realizaban “autos de fe”, monstruosas ceremonias en las que quemaban vivos y/o descuartizaban a sus opositores, valiéndose del terror para mantener sus prebendas y control sobre las sociedades sometidas a ellos.
En Francia la Revolución de 1789, que reivindicó los derechos y las libertades esenciales de todo ser humano, abolió la “santa inquisición” que solo sobrevive al día de hoy en la Sagrada Congregación de la Doctrina de la Fe en el Vaticano.
Inquisición y “autos de fe” continuaron muy vivas en España hasta que las doctrinas liberales fueron barriendo tales prácticas, reemplazadas luego por “tribunales populares”, juicios políticos, las policías represivas como la KGB en Rusia (Putin, el dictador ruso, encabezó la KGB hasta su disolución formal), los tonton macoutes de Haití, la brutal policía venezolana que protege a la narcodictadura…
El propósito es siempre el mismo: impedir que la gente critique, señale, desmienta, acuse. Y al lado de esas entidades surgen otras, como los grupos que linchan cibernéticamente o a través de juicios, a quienes señalen abusos de grupos raciales, ataquen a la comunidad LGBTI, cuestionen a los que cuestionan, etcétera. Como cuando los niños en un colegio propinan una “parranda” al muchachito que algo hizo para distanciarse del resto.
La nueva modalidad en el mundo son los linchamientos vía troles, una práctica sucia que actualmente manejan los rusos pero que se ve en otras latitudes: se detecta cuando las alabanzas en favor de un funcionario empalagan, como asimismo ensucian a opositores acusándolos de lo que sea.
A fin de cuentas el cerebro del común de alguna gente solo con dificultad logra separar la basura de lo que algún valor tiene.
Estamos peligrosamente cerca de hundirnos en trolecracias en el mundo…
Voltaire libró una noble batalla a lo largo de su vida para liberar a los hombres de la censura, lo que le llevó a vivir en un castillo muy cerca de la frontera entre Francia y Suiza; llegado el momento, podía cruzar la frontera, aun cuando los suizos de aquel entonces eran casi tan cerrados de la cabeza como los franceses en la época de Luis XV.
Los restos de Voltaire se veneran en el Panteón de París…
Desinformar equivale a echar arena sobre los engranajes productivos
El grave problema que genera la desinformación o la información a medias para la gente de un país se presenta cuando tienen que tomar decisiones.
Así como un agricultor debe conocer lo que ofrecen los mercados para sus productos y partiendo de ello definir en qué invierte su dinero, la población en general tiene que basar sus decisiones en datos confiables, incluyendo lo relacionado con la política.
Pero cuando sistemáticamente se manipula o se trata de tergiversar lo que se hace o se dice, la gente queda sobre terrenos gelatinosos, lo que equivale a tirar arena sobre los engranajes de una maquinaria, en este caso la maquinaria productiva de un país: hay menos producción, más incertidumbre, dudas sobre el futuro, menor empuje.
La condena de un gobierno por prácticas contrarias a la libre expresión no es un acto sin consecuencias, sino un grave mensaje, pues se dice a todos que pongan sus barbas en remojo, que actúen con cautela, que desconfíen.