Más de 50 años de partidos de la Selecta ante selecciones de Europa
El Salvador sumará ante Islandia (aunque en un partido de entreno) un encuentro y un rival a la lista de partidos contra selecciones del viejo continente. Aquí el recuento.
La historia de la selección de El Salvador ante rivales europeos llega a los 22 partidos, y hay encuentros que han marcado la historia para el conjunto salvadoreño. Esa historia crecerá este domingo cuando se enfrente la Selecta a Islandia en el Dignity Health Park de Los Ángeles, California, aunque en calidad de entrenamiento, sin puntos de ranking FIFA en juego.
En 52 años que han transcurrido desde el primer partido ante una selección del viejo continente, se han realizado 22 enfrentamientos en todas las competencias entre la Selecta y rivales de Europa.
Estos juegos no dejan historial positivo para la Azul y Blanco, ya que apenas ha ganado en tres ocasiones, empatado en una y las restantes 18 fueron derrotas.
Este domingo, en el amistoso de entrenamiento, Islandiaserá la decimotercera selección europea a la que la Selecta se medirá, algo que ha sucedido, en parte, porque en los primeros 23 años de historia hubo diez partidos contra las mismas tres selecciones (Hungría, Unión Soviética y Bélgica).
La Cifra
22
Partidos son los que ha jugado El Salvador ante rivales de Europa: Hungría (5), Unión Soviética (3), Dinamarca (3, 2 oficiales), Grecia (2), Bélgica (2), CEI (Comunidad de Estados Independientes, 1), Rusia (1), Estonia (1), Yugoslavia (1), Moldavia (1), España (1) y Armenia (1).
Para el primer encuentro entre salvadoreños y europeos hay que remontarse al 13 de octubre de 1968, cuando en los Juegos Olímpicos de México, la Selecta debutó en la historia futbolera olímpica ante Hungría, en partido que terminó 4-0 a favor de los magiares.
Iván Menczel (19’), Antal Dunai (47’), Laszlo Fazekas (51’) e Istvan Sarkozi (68’) fueron los anotadores de la selección europea en aquella ocasión.
Por casualidades del destino, volvieron a verse las caras con Hungría catorce años después, durante la Copa del Mundo España 1982, donde los magiares le anotaron a la Selecta la goleada más grande en la historia de los Mundiales, con el inolvidable (y tristemente célebre) marcador de 10-1.