Houtouwan, el pueblo de pescadores abandonado y devorado por la naturaleza en Shanghái

Hutuwan fue creado en 1950 y prosperó gracias a la pesca, llegando a tener 3,000 habitantes. Pero su puerto era demasiado pequeño para acoger a barcos de gran tamaño y perdió lustre.

La aldea china Hutuwan supo albergar cerca de 2.000 personas. Pero ahora la naturaleza cubre casi por completo calles y casas abandonadas.

Por N. Hernández / Agencias

2020-01-06 7:40:50

Las casa en ruinas están forradas de follaje, las calles invadidas por plantaciones de todo tipo y la niebla hace del lugar una ilusión mágica, como un pueblo de ensueño o de cuentos de hadas.

Houtouwan es un pueblo de pescadores que fue abandonado hace años, está entre acantilados y se edifica entre las brumas marinas que oscurecen en el horizonte, está situado en la isla oriental de Shengshan, 90 kilómetros de la costa de Shanghái.

El pueblo se libra del bullicio que caracteriza a las grandes ciudades, los únicos sonidos que imperan son los del oleaje, el zumbido de mosquitos y el canto de los pájaros. A veces, estos sonidos naturales son interrumpidos por grupos de turistas que desafían los senderos fangosos a través de jardines cubiertos de maleza.

Los visitantes deben de tomar un bote hasta Shengshan y después un taxi hasta una colina que conduce a un cementerio, luego descienden por senderos.

El desenfrenado desarrollo económico en China ha devorado la vegetación, que ha tomado su revancha en una pequeña aldea insular, cubierta de plantas y maleza. Foto AFP

En el pueblo habitan cinco personas, entre ellos Sun Ayue, un expescador de 62 años quien es testigo de la despoblación del lugar.

Relata que después de las reglamentaciones pesqueras que se impusieron en 1990 la población de peces disminuyó rápidamente en la zona y los pobladores regresaban a casa con sus redes vacías.

Pero también la falta de una escuela y de transporte adecuado, influyó en la decisión de dejar el lugar.

Hutuwan fue creado en 1950 y prosperó gracias a la pesca, llegando a tener 3,000 habitantes. Pero su puerto era demasiado pequeño para acoger a barcos de gran tamaño y perdió lustre.

El único escollo en la reconquista vegetal del pueblo son los turistas que se acercan a esta isla situada a 140 km de Shanghái para admirar la magia del paisaje. Foto AFP

Olas de gran altura embisten la costa durante algunas temporadas al año, impiendo atracar a las pequeñas embarcaciones. La única manera de conectar Hutuwan con el resto de la isla es por tierra, a través de un sendero sinuoso.

“Cuando las mujeres daban a luz, cuando los niños iban al colegio, cuando los ancianos necesitaban cuidados no tenían otra opción más que tomar este camino”, cuenta a la AFP Wang, una habitante que ahora trabaja en el pueblo abandonado como agente de seguridad.

“Cuando éramos jóvenes era muy divertido, íbamos a la playa en busca de mariscos”, recuerda con nostalgia.

“El caso es que cuando la gente empezó a tener más dinero poco a poco se fue yendo de la ciudad“, explica.

Hutuwan fue creado en 1950 y prosperó gracias a la pesca, llegando a tener 3.000 habitantes. Pero su puerto era demasiado pequeño para acoger a barcos de gran tamaño y perdió lustre.

En los últimos años, los turistas paseaban libremente por la aldea y se hacían selfis pero desde 2017 las autoridades los obliga a comprar una entrada de 50 yuanes (6.70 euros, 7.8 dólares) y a seguir un recorrido señalizado.

El pueblo refleja la tendencia migratoria más grande de China que ha provocado innumerables desplazamientos desde las áreas rurales a megaciudades urbanas, como Shanghái, Shenzhen y Guangzhou.

A pesar de su despoblación y los rumores, el pueblo no está embrujado. La soberbia de la naturaleza que impera en el terreno ha llevado a las personas a llamarlo “pueblo fantasma”. ¿Te animarías a visitarlo?

Olas de gran altura embisten la costa durante algunas temporadas al año, impiendo atracar a las pequeñas embarcaciones. La única manera de conectar Hutuwan con el resto de la isla es por tierra, a través de un sendero sinuoso. Foto AFP

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