¡La bocana de la Barra de Santiago está en peligro!

No puede ser que el bienestar de una persona prime por sobre todo un país. Y hago un llamado urgente a las autoridades para que resuelvan este mal momento por el que atraviesa la comunidad de la Barra de Santiago.

descripción de la imagen
Foto EDH/ archivo

Por Ricardo Lara

2019-12-19 7:27:05

Quería hablar de Navidad, de lo que es tradición en estas épocas de lo que vemos de lo que sentimos y aspiramos, pero en El Salvador es imposible, siempre hay algo que sorprende. A continuación lo dicho por el Sr. Ministro de Agricultura: “Están cerrando la bocana de la Barra de Santiago. ¿Qué pasará con la bocana que salvadoreños acostumbran a disfrutar? Esto no puede ser, es un espacio público. Vamos a investigar junto a las instituciones competentes sobre quién está haciendo esto. ¡Este paraíso es de todos!”.
Hay un marco jurídico que todos debemos respetar, desde el Presidente de la República hasta el más sencillo y olvidado ciudadano. Eso conlleva el respeto a los bienes del Estado. No puede estar el bienestar de una persona por sobre el de una comunidad y en este caso es el bienestar de todos los salvadoreños, pues la bocana es un bien público y deben las instituciones garantes como es la Fiscalía General de la República, el Ministerio del Medio Ambiente y el Ministerio de Agricultura involucrarse con la mayor brevedad a resolver este vergonzoso episodio de toma de tierras.
No se hace democracia quien alce más la voz, el que grita más fuerte o el que asume por derecho propio que determinada parte de una playa le pertenece; se hace democracia cuando el marco jurídico se aplica en forma justa y oportuna.
La bocana de la Barra de Santiago pertenece a El Salvador y no se puede llegar a cercar aduciendo que de un día para otro es propiedad privada. Lejos quedaron los tiempos de las tierras ejidales que fueron arrebatadas intimidando a sus propietarios.
Los tiempos son diferentes y lo que sostiene nuestra incipiente democracia es la independencia de poderes del Estado y serán ellos los que velarán por que esta toma forzosa de la Barra de Santiago no se lleve a cabo. Mal ejemplo sería que a perico de los palotes le dé por cercar lo que crea pertenecerle sea esta imaginativa producto de un mal sueño o creyendo que está por encima de la ley.
Se debe ser claro. Si hay escrituras que amparen a particulares, están en su derecho de exigir lo que les pertenece. Ahora, si por el pasar del tiempo ha sido el mar que poco a poco tomó lo que le pertenece poco pueden hacer, pues existe un riesgo de tener una propiedad tan cerca de las olas. Cosa rara que la bocana ha permanecido libre y de repente aparecen diciendo que tienen escrituras y cercando lo que por años ha sido de la comunidad, de los pescadores, de todo salvadoreño que desee disfrutar de tal paraíso.
Debe el Ministro de Agricultura y todas las instituciones proteger a toda costa nuestro patrimonio y sentar un precedente pues si no se toman cartas en el asunto con la brevedad posible, estamos ante un problema serio que hoy afecta la Barra de Santiago y mañana podrá ser Metalío, o un espacio de la costa de Acajutla.
El Salvador debe ser reconocido por sus bellezas naturales y es la Barra de Santiago un patrimonio de los salvadoreños. No puede ser que el bienestar de una persona prime por sobre todo un país. Y hago un llamado urgente a las autoridades para que resuelvan este mal momento por el que atraviesa la comunidad de la Barra de Santiago.
La ley debe ser pareja, nadie puede estar por encima de ella aunque esas son palabras que difícilmente sea una realidad en un país con una institucionalidad tan débil como la que solemos ver y ya ni nos sorprendemos; pero hay un nuevo gobierno y debe velar por la conservación de lo nuestro, no de lo ajeno. No necesitamos ser la capital del Surf, necesitamos ser la capital de la justicia, del respeto a la propiedad privada y repito las palabras de los nativos de la bocana: “La bocana ha sido nuestra, de todos, vamos a bañarnos cuando queremos y no vamos a permitir que alguien se apropie de lo que nos pertenece”.
Con esta triste historia no sé cómo decir feliz Navidad, pero bien visto lo visto desde Garita Palmera hasta Conchalío la costa está en peligro. Ayer la isla Perico, hoy la Barra de Santiago, esperemos a ver qué sigue mañana. En lo personal, para mí la Barra de Santiago es parte de toda mi vida.

Médico.