Los pescadores artesanales de las comunidades costeras de los municipios de La Unión y Conchagua están alarmados ante la masiva muerte de moluscos.
El hecho, que comenzó hace unos diez días y ha ido en aumento, ha provocado pérdidas estimadas en más de 25,000 dólares para quienes viven de la comercialización de estos productos marinos.
Esta es la primera vez que ocurre una muerte masiva de moluscos en las costas, aseguraron los residentes del cantón Huisquil, de Conchagua.
Los afectados estiman la muerte de más de un millón de moluscos esparcidos en un área aproximada de siete kilómetros de costas del departamento de La Unión.
Los pescadores contaron que, tras el aparecimiento de millones de almejas, mejillones, curiles y cascos de burro muertos, percibieron un olor fuerte a combustible, además de agua con mezclas de grasa.
Los lugareños temen que las muertes de las conchas hayan sido provocadas por algún derrame de sustancias químicas de algún barco de la zona.
Sin embargo, el biólogo Enrique Barraza, consultado al respecto, expresó que primero debe hacerse un análisis del oxígeno en la zona, para descartar que no sea una floración de algas o la llegada de un virus el que afectó a los bivalgos (mejillones y almejas).
“Lo primero que me extraña es que no hay peces y cangrejos muertos, se descartaría un químico y los bivalgos que han muerto son un molusco que no se pueden mover, entonces posiblemente algún tipo de floración algal o una baja de oxígeno es lo que ocasionó esa mortandad. Podría considerarse algún virus que llegó. Habría que hacer análisis sobre todo del oxígeno para descartar”, indicó el experto.
El ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales ya inició una investigación para determinar qué causó la muerte de los moluscos en un sector de la Isla Perico en La Unión. Preliminarmente ha informado que la salinidad y corriente en la superficie no indican la existencia de marea roja.
Junto al @minsalud estamos investigando qué causó la muerte masiva de moluscos en un sector de la Isla Perico en La Unión.
La salinidad y corriente en superficie no indican la existencia de marea roja. pic.twitter.com/CRNQ8qe6mC
— Ministerio de Medio Ambiente (@MedioAmbienteSV) November 17, 2019
Además recomendó a las personas que, por precaución, no consuman moluscos de la zona.
Producto de subsistencia
Al recorrer las zonas afectas y cuando la marea baja, se observa varios kilómetros de conchas muertas a orillas de las playas y esteros.
Hombres, mujeres y niños llegan a las zonas, con las esperanzas de sacar de entre el lodo algunos moluscos con vida para luego comercializarlos.
Mártir Pérez, presidente de la Cooperativa de Pescadores de El Conchillal, cantón Huisquil, de Conchagua, manifestó que el viernes llegaron 15 técnicos del Centro de Desarrollo de la Pesca y Acuicultura (Cendepesca) a recoger muestras de los moluscos y aguas para hacer las investigaciones respectivas.
Según Pérez, hay una grave preocupación porque son miles de familias las que viven del trabajo de la extracción del molusco que luego es comercializado en los mercados.
“Fueron apareciendo los moluscos muertos se sintió el olor como a combustible en el agua y como manchas en aceite”, agregó Pérez.
En la cooperativa de El Conchillal, perdieron alrededor de 8,000 dólares en los viveros de producción de la ostra japonesa y el casco de burro.
Alexander Asencio, pescador de la cooperativa El Conchillal, dice que todo el producto se está muriendo, ya no les queda recursos.