Esta noche, Alianza inicia en el estadio Cuscatlán, la serie semifinal de Liga Concacaf contra el Motagua de Honduras, con el que podrían regresar a la elite de la región.
La última final internacional que jugaron los paquidermos fue en 1997, cuando quedó campeón de la Copa Interclubes de la Uncaf, cuando le ganaron 1-0 al Saprissa de Costa Rica. Un recuerdo que todavía se mantiene vivo en muchos seguidores albos, los cuales están muy ilusionados con estar en otra fiesta grande en la región.
El plantel aliancista también se ha contagiado con esa ilusión de estar en la final de esta competencia, es por ello que el mediocampista de este equipo Óscar Cerén mencionó que “En estos momentos, el partido contra Motagua es más importante que cualquiera de la Liga”.
La motivación que se vive en Alianza, la demostraron los jugadores albos ayer, cuando realizaron el último entrenamiento previo a este compromiso.
“Nos hemos encontrado con buenos resultados que nos dan tranquilidad. Llegamos motivados por ser el único representante de El Salvador aún en Liga Concacaf”, comentó Wilson Gutiérrez, técnico de los paquidermos.
En el torneo local, donde suma tres triunfos consecutivos y 33 puntos, los paquidermos tienen la tranquilidad de estar seguros con el liderato y por ello se han podido concentrar completamente en este partido, del que quieren aprovechar la localía: “buscaremos ganar primero y luego tener una ventaja importante para la vuelta. Cuando avanzamos de fase se vuelve más difícil y son partidos que deben jugarse con paciencia e inteligencia”, señaló el DT albo.
Gutiérrez contará con equipo completo para encarar a los catrachos, tomando en cuenta las rotaciones que hizo en el equipo para darle el mayor descanso a los jugadores.
Alianza llega a estas semifinales, después de superar a dos equipos panameños, San Francisco y Tauro, en la fase previa y octavos de final. Luego, al San Carlos de Costa Rica, en cuartos.
Motagua llegó ayer por la mañana a El Salvador. Se concentró en un hotel capitalino en la Zona Rosa y en la tarde noche hicieron el reconocimiento de cancha al Cuscatlán.
Los hondureños llegan optimistas de que podrán sacar un buen resultado frente a los albos, aunque en su Liga no la están pasando bien, con solo dos victorias en sus últimos cinco partidos. Motagua viene de perder (1-0) contra el Vida y por ello están en la tercera posición.
A pesar de ello, Wilson Gutiérrez no se confía del rival y toma sus precauciones: “He visto los partidos de Motagua, contra Platense y Vida. Tiene jugadores rápidos, fuertes en juego aéreo y que presionan. En medida que hagamos nuestro trabajo podemos hacer daño”, apuntó el estratega colombiano.
“El Ciclón”, como es conocido este equipo hondureño, llega a esta fase después de haber superado al Managua de Nicaragua y al Waterhouse de Jamaica, en octavos y cuartos respectivamente.
Motagua fue el último campeón del Interclubes de Uncaf, en el 2007, al también derrotar al Saprissa tico (2-1, en el global). Siendo este su único titulo internacional.