El Salvador cuenta con pocos espacios culturales y de diversión destinados para los “reyes de casa”. Uno de estos lugares es el Museo de los Niños Tin Marín, contiguo al Parque Cuscatlán, en San Salvador.
Este recinto cultural y de entretenimiento es un pequeño mundo de colores y formas, en el cual se viven experiencias enriquecedoras bajo el lema “Jugando se aprende”.
Por ello, ayer abrió sus puertas a la muestra temporal e internacional “De viaje por el universo”, la cual hace vivir a sus visitantes una experiencia única y maravillosa más allá del planeta Tierra.
“Estamos muy contentos y orgullosos por esta nueva exhibición. Es un viaje lleno de maravillas que estimula todos los sentidos”, expresó Juan Carlos Novoa, director ejecutivo del museo durante la apertura de la exhibición.
En la exposición, el público explora galaxias, agujeros negros, planetas y estrellas. Los guías del museo hacen que los niños echen a volar su imaginación y los conducen por diferentes salas donde se presentan, de forma dinámica y atractiva, algunos aspectos del universo. Para atrapar la atención y el interés de los asistentes, en la muestra se hace uso de proyecciones y de esculturas de diferentes tamaños.
La aventura comienza con una simulación de la instalación de la NASA en Cabo Cañaveral, Florida, Estados Unidos. Lugar donde se han lanzado las más importantes misiones con naves espaciales. Es en este punto donde el público también recibe información respecto a la llegada del hombre a la Luna.
Luego, los asistentes son “transformados” en astronautas y para ello se les colocan unos “cascos” especiales. Tras convertirse en cosmonautas comienza la alucinante exploración.
Uno de los puntos de la exposición que hace gritar y reír de emoción a los visitantes es el túnel vortex. Se trata de un pequeño y angosto pasillo cuyas paredes giratorias y luminosas provocan una extraña sensación de vértigo que pone a prueba los sentidos.
En ese viaje sideral el público también conoce más de cerca la Luna, los planetas rocosos y gaseosos y el sol.
La sala donde se muestra al “astro rey” es muy cálida, simulando la temperatura provocada por esa estrella.
Con el deseo de innovar y ofrecerle al público una experiencia más interactiva, el Tin Marín cuenta con un salón de realidad virtual. Esta área se habilitó con el apoyo de una empresa especialista en tecnología, quien pone a disposición unos modernos visores que llevan a los usuarios a recorrer, de manera fascinante, el universo y a conocer de cerca los planetas del sistema solar.
“De viaje por el universo” es una exposición que se trasladó desde Costa Rica a El Salvador, gracias al esfuerzo de algunas empresas patrocinadoras.
Para hacer más emocionante la exploración intergaláctica están disponibles el Planetario y el Módulo lunar, exhibiciones permanentes.
La visita a esta exposición tiene un costo de $5 por persona. Los usuarios tienen la opción de un combo de $6, que incluye el recorrido por esta nueva muestra y por las otras 43 exhibiciones del museo.
Las actividades de realidad virtual tienen un valor extra de $2 y las funciones del Planetario cuestan $1.
El museo está abierto de martes a domingo de 9:00 a.m. a 5:00 p.m.