La Selección Nacional mayor viaja hoy al mediodía a Miami, donde dormirá una noche previo al recorrido que debe hacer hasta Montserrat, primera parada de esta fecha FIFA para jugar Liga de Naciones de Concacaf. El jueves llegará a la isla, pero antes debe hacer una escala en Antigua y Barbuda, país donde tomarán un ferri para llegar al destino.
Ese trayecto ya lo conoce buena parte de la delegación, puesto que en la fase clasificatoria de esta nueva competencia se tuvo que hacer, donde se sacó un triunfo ajustado con marcador de 2-1, con dos goles de Óscar Cerén.
El único contratiempo que ha tenido Carlos De los Cobos, entrenador de la Azul, es que no pudo realizar entrenamientos con el grupo completo en San Salvador, ya que Denis Pineda hizo escala en Miami, pero llegó tarde debido a problemas climáticos, que obligaron al avión que salió desde Lisboa a aterrizar en otro aeropuerto y perdió la conexión hasta El Salvador, donde era esperado ayer para la práctica vespertina, la penúltima en el país.
La Fesfut aseguró que le consiguió un nuevo pasaje, pero de última hora decidieron que el volante del Santa Clara de Portugal se quedara en Miami para no cargarlo con más horas de viaje, según confirmó el mismo jugador a EDH.
No todo es malo, puesto que el lunes por la tarde se integró Darwin Cerén; y ayer por la mañana ya estaba con sus compañeros Juan Barahona, quien regresa tras una ausencia de varios meses, debido a problemas personales que lo obligaron a dejar a la Selecta antes del partido amistoso contra Japón y la Copa Oro de este año.
“Me perdí esos encuentros, para mí fue un poco doloroso, pero por cosas personales no pude viajar. Lo platicamos con el profesor, quedamos en buenos términos y yo tuve que viajar a mi equipo porque tenía problemas con los pasaportes de mi esposa y de mi hija”, confesó el lateral izquierdo, quien llega en buena forma porque se ha ganado un puesto en el equipo titular del Sacramento Republic de la USL.