Agricultores de Suchitoto crean el “Santuario de Semillas”
Este espacio para el resguardo de los granos, en el cantón El Roble, es el primero que se construye a nivel nacional, como una iniciativa para mejorar las condiciones alimenticias en la zona rural.
SUCHITOTO. En una habitación construida de barro, madera y tejas, el agricultor Omar Efrén Acosta Peraza toma una de las 60 vasijas que se encuentran entre estantes hechos de tablas de madera.
En sus manos vierte una finísima semilla, comentando al mismo tiempo: “La fuerza de nuestros ancestros venía de esta semilla; los españoles a su llegada, al darse cuenta de dónde provenía la fortaleza de nuestros ancestros, se encargaron de quemar las plantaciones y llevársela”, señaló refiriéndose al amaranto, una planta que formó parte de la dieta de los pueblos originarios de El Salvador y de Mesoamérica, la cual es conocida por su alto contenido de proteína vegetal, hierro y fósforo.
La semilla de amaranto es una de las 11 variedades nativas y no nativas que forman parte del primer “Santuario de Semillas”, inaugurado el pasado mes de junio y organizado en conjunto con los integrantes del Movimiento Permacultor de El Salvador y Redes, una organización no gubernamental que trabaja con las comunidades rurales para mejorar sus condiciones de vida, en el cantón El Roble, de Suchitoto, Cuscatlán.
Este proyecto funciona por medio de préstamos de semilla, es decir que si un agricultor toma cierta cantidad para su uso, se compromete a regresar una parte de la cosecha al santuario para renovar las reservas que podrán usar otros campesinos.