Multitudinaria despedida a Rigoberto Orellana, el ingeniero asesinado mientras esperaba pasar consulta en una clínica de San Juan Opico
Los padres de Rigoberto Orellana afirmaron que perdonan al asesino de su hijo, y le hacen un llamado a que se arrepienta. El joven fue sepultado en el cementerio de Joya de Cerén.
Con una multitudinaria asistencia de fieles y vecinos, dieron este jueves por la mañana el último adiós a los restos de Rigoberto Arnulfo Orellana Canales, de 26 años, asesinado el martes por un hombre armado, que lo atacó mientras esperaba pasar consulta en la Unidad de Salud en Sitio del Niño en San Juan Opico, La Libertad.
La población que admiraba y quería mucho a Rigoberto Arnulfo se movilizó en varios buses y vehículos particulares después de las 10:00 de la mañana.
Las exequias fueron realizadas después de una concurrida misa en el cementerio de Joyas de Cerén, en San Juan Opico.
En el cantón Sitio del Niño, hay un gran pesar por el asesinato del joven ingeniero, a quien describen como un ciudadano ejemplar y quien recientemente se había graduado de la Universidad Centroamericana.