La ministra de Salud, Ana Orellana Bendek, informó ayer que el Comité de Auditoría Clínica confirmó que la muerte de un niño de 9 años de edad, ocurrida el 19 de enero pasado, y la de una niña de 5 años, acaecida el 23 de junio, fueron causadas por el dengue, con lo cual se convierten en las primeras dos víctimas mortales de esta enfermedad en lo que va de 2019.
Orellana Bendek, durante una entrevista televisiva, señaló que 5 fallecimientos más asociados con dengue aún siguen en estudio, y de igual manera confirmó que ya está circulando en El Salvador el serotipo 2 del virus del Dengue que es más agresivo que los serotipos 1,3 y 4.
De acuerdo con los detalles brindados por la funcionaria, la primera víctima mortal llegó al Hospital Benjamín Bloom, en la capital, procedente de Ciudad Arce, en La Libertad. La segunda víctima llegó desde San Julián, en Sonsonate.
Hasta ayer las autoridades de Salud no se habían pronunciado sobre la muerte de un niño de seis meses de edad con 10 días de nacido, ocurrida el viernes a las 10:30 p.m. en el Hospital Bloom a donde llegó referido del Hospital San Rafael, y que según el acta de defunción mostrada por los padres habría muerto por complicaciones asociadas a dengue.
Según el boletín epidemiológico que el Ministerio de Salud generó para la semana 27, que comprende del 1 al 7 de julio, este año 6,609 casos fueron atendidos por sospecha de padecer esa enfermedad. El año pasado el registro en el mismo lapso fue de 2,597.
“Es grave, es serio lo que está pasando con el dengue. Se ha elevado, se nos han disparado los casos febriles, sobre todo en los grupos vulnerables, y en este caso los niños”, advirtió.
La ministra de Salud sostuvo que a raíz de esta situación desde hace más de una semana están en conversaciones con la Dirección de Protección Civil “porque creo que vamos en camino a tomar medidas sanitarias ya de emergencia”.
Iván Solano Leiva y Jorge Panameño, dos médicos infectólogos que laboran en el sector privado, quienes días atrás ya habían advertido sobre la posible presencia del serotipo 2 del virus del Dengue, expresaron su preocupación sobre el impacto que la enfermedad tiene en este momento entre la población cuando apenas ha empezado la época de lluvias, y otros países vecinos ya reportan muchos casos de muertes por dengue como en Honduras en donde hay alerta nacional, República Dominicana, e incluso en Cuba.
Solano Leiva sostiene que la gravedad de los casos de dengue en este momento no solo podría estar asociada con el hecho de que está presente el serotipo 2, sino que también podrían estar circulando los 4 serotipos al mismo tiempo.
“Nosotros creemos que vamos a tener epidemia de dengue este año. Eso creo que no lo van a poder parar porque todo orienta a eso”, citó, tras advertir que el último reporte del corredor endémico de dengue presentado por el Ministerio de Salud ya muestra que estamos en nivel de alerta, a un paso de epidemia.
El doctor Panameño, por su parte, opinó que los datos de ese reporte de Salud no solo evidencia que hay un 300 % de incremento en el número de casos de dengue, sino que también hay más casos de dengue severo.
Panameño señaló que el Ministerio de Salud tiene que hacer actividades de educación médica continua sobre el dengue para el personal de los niveles 1 y 2 de los servicios de salud porque ahí es donde los pacientes van a llegar a consultar inicialmente.
“No se trata de que se actué rápido o no, sino de saber actuar, tener el conocimiento necesario para diagnosticar tempranamente una condición potencialmente mortal, y eso deviene de capacitar a las personas”, insistió.
El infectólogo dijo que además de que se dé en forma masiva una capacitación apropiada al personal médico, también se debe hacer eso con los servicios de auxilio como son los laboratorios, para que den rápido los resultados de exámenes.
“El dengue severo no va a dar mucho chance, en un periodo de tres días el paciente puede estar muerto, quien quiera que sea niño o adulto, por eso su atención tiene que ser rápida, oportuna y con la calidad del caso”, detalló.
Para el doctor Rodrigo Simán, vicepresidente de la Asociación de Pediatría de El Salvador (ASOPEDES), es importante que la población sepa que estamos ante un brote de dengue y que entre más pequeños son los niños tienen mayor riesgo de sufrir más complicaciones por el dengue, por eso cuando hay fiebre alta se debe consultar rápidamente en una unidad de salud o a un médico pediatra.
Subrayó que la situación incluso es más delicada para los niños menores de un año, y con aquellos que tienen enfermedades crónicas, como diabetes o desnutrición.
El pediatra insistió en que no se debe recurrir a la automedicación, especialmente en estos grupos.
”Ante los casos de fiebre, cuando hay brotes de enfermedades como el dengue, solamente acetaminofén y suero oral (se puede usar), mientras pueden consultar a un médico; y en niños más grandes cuando hay signos de alarma como son dolor abdominal, vómitos, acompañado de fiebre, dolor articular, y dolor de los ojos hay que acudir de emergencia, y saber que no hay que llevarlos a un sobador, no hay que darles medicamentos como antiácidos que solo pueden complicar un cuadro de dengue…”, advirtió.
El doctor Simán, en su calidad de representante de la ASOPEDES, hizo un llamado a la población, al gobierno central, a las municipalidades, a la empresa privada que tienen que reforzar las campañas de prevención, de abatización, de fumigación.
“La población tiene que revisar su metro cuadrado donde viven para que no haya residuos con agua estancadas”, enfatizó.