La ministra de Salud, Ana Orellana Bendek, informó ayer que se encuentran investigando la muerte de seis personas que se presume ocurrieron por dengue grave, luego de presentar un cuadro febril similar al de la enfermedad.
Sin embargo, manifestó que estos casos están en “auditoría clínica”, es decir que indagarán si se relacionan directamente con dengue. Este análisis será realizado por un “equipo multidisciplinario de alto nivel” con personal médico del extranjero, y su resultado podrá tardar hasta un mes, explicó.
Eso sí, enfatizó que no tienen ningún caso confirmado de fallecimiento por la enfermedad, que es transmitida por la picadura del zancudo Aedes Aegypti. No confirmó en qué zona del país se dieron las muertes sospechosas.
“Muertos hasta la fecha tenemos cero. Estoy hablando de confirmados. Hay seis pacientes que han muerto por sospecha de dengue. Estos casos entran en un proceso de auditoría clínica, que es todo un proceso que puede durar un par de semanas hasta un mes, porque intervienen muchas especialidades médicas para determinar correctamente si la persona murió a causa de dengue”, dijo la funcionario en una entrevista radial.
Según Orellana Bendek, las personas fallecidas presentaban una sintomatología relacionada con el dengue, pero se debe determinar si murieron por causa de algún padecimiento previo.
Tomando en cuenta la cercanía con Honduras, donde se ha declarado emergencia y hay cerca 48 muertes confirmadas, según reportes oficiales, la titular de Salud señaló que están tomando las medidas necesarias para que no se propague la enfermedad, pero no habló de declaratorias de epidemia.
Explicó que hay 6,609 casos bajo sospecha, es decir con algunos síntomas propias de la enfermedad. Esta cifra revela un incremento de 4,312 casos más con respecto al años pasado, aseguró.
“Confirmados tenemos 58, que son pacientes a los que se les ha hecho prueba y que se les ha confirmado la enfermedad”, agregó.
La ministra enfatizó que el mayor problema al que se enfrentan es el incremento del índice larvario, que ha superado el 11 % máximo registrado con anterioridad en el país. El límite controlado es del 4 %, según la cartera de Salud.
Niega epidemia de paperas
La ministra de Salud también afirmó que no existe una epidemia de paperas, sino “una elevación considerable de casos”, contrario a lo que sostuvo días atrás el infectólogo Iván Solano Leiva.
La funcionaria dijo que aún no se ha traspasado la línea de peligro que indica una epidemia y que esta, por el contrario, ha dando signos de ser controlada.
“Hay elevación de casos pero no se considera epidemia, porque no ha llegado a la línea roja. Hay una elevación de casos, (pero) hay que hacer intervención para volverla a disminuir”, manifestó.
En tanto, el infectólogo Solano Leiva dijo el martes que el promedio anual de casos de paperas o parotiditis ha sido de 227 pacientes con la enfermedad. No obstante, aseguró que en este año se ha llegado a los 1,001 casos, según datos que él mismo solicitó a la de Dirección de Vigilancia Sanitaria.
“Estos datos claramente hablan de que hay una epidemia de paperas. Desde hace tres semanas estoy solicitando a la ministra de Salud que publiquen los datos”, señaló.