Katharine Anne Porter, Robert Penn Warren, Zora Neale Hurston. Fotos cortesía
Estos escritores, con la ayuda de las bibliotecarias quienes les dieron de comer y les permitieron dormir en los sótanos de las bibliotecas públicas de Nueva York durante los inviernos con nieve, estas personas, digo, formaron el Renacimiento de Harlem. Muchos de ellos encontraron ayuda y trabajo en los programas del New Deal, por ejemplo, en el Works Progress Administration (WPA).
A su manera, en esencia sureña, mística y surrealista, Toomer dibuja las manifestaciones del racismo y la violencia en el Sur, junto con los anhelos de una vida mejor en el Norte. Consideremos la cruda y rítmica metáfora de su cuento Blood Burning Moon (La Luna que arde con sangre):
Red nigger moon. Sinner!
Blood-burning moon. Sinner!
Come out that fac’try door.
O, consideremos el lirismo y canto bellísimo de Karintha, una joven negra adolescente y el refrán que capta el sentido místico y religioso de los negros de Georgia:
Smoke, rise up upon the hills… Oh, Fly away to Jesus. (Humo, surge a las colinas… Ah, vuela a Jesús).
Eudora Welty, otra escritora quien trabajó en el Works Progress Administration, eventualmente ganó el Premio Pulitzer y escribió, en su obra Una cortina verde, finas y elegantes representaciones de la aldea donde nació en el estado de Mississippi, en Delta County, donde fluye el río Mississippi hacia su delta. En sus escritos, Welty capta la sencillez y lo complejo de la conciencia histórica de los pobres sureños de este estado.
Robert Penn Warren nos presenta en sus escritos a Willie Stark, en este roman à clef alusivo al político populista, históricamente verídico, al senador Huey P. Long, conocido como “The Kingfish” (especie de ave del río muy agresiva).
Por esta novela, All the King’s Men (Todos los Hombres del Rey (1946), y otras, ganó tres veces el Premio Pulitzer. Es una novela sumamente política sobre los tiempos de Roosevelt, el New Deal y la política de las elecciones del estado de Louisiana, estado en que, en aquellos tiempos, los votantes eran los más pobres de los pobres, que muchos llamaron “poor white trash” (la pobre basura blanca) o “hicks”, otro nombre de insulto para los blancos pobres parceleros.
Willie Stark (léase, Huey Long) era el candidato político que representaba a la “poor white trash” del estado de Louisiana, y la novela muestra las ironías de cómo este político que comienza luchando por los pobres y contra la corrupción termina involucrado en la corrupción misma en los tiempos del New Deal. En la vida real e histórica, Huey Long era tan exitoso por el número de votos que le daban las masas de habitantes pobres del Sur que hasta provocó la envidia de Roosevelt por su popularidad entre los sureños pobres. Es que el presidente del New Deal temía que pudiera, potencialmente, amenazar, como candidato, su reelección para la presidencia misma.
Carson McCullers era una mujer sureña y la más moderna en este escenario literario. Escribe y publica, en la década de los cincuenta, novelas escritas en un estilo antiséptico, puro y claro. Utilizó la pluma como bisturí en el desmembramiento de la psicología de personajes grotescos en varias esferas del Sur durante la Guerra Fría, después de la muerte de Roosevelt y el inicio del Plan Marshall en Europa, es decir, después de la Gran Depresión, el New Deal y la Segunda Guerra Mundial.
Su novela Reflections in a Golden Eye (Reflejos en un ojo dorado), por ejemplo, es una obra que nos lleva al mundo asfixiante de las instalaciones militares en el Sur y presenta las relaciones personales distorsionadas por la vida de las familias en estos campamentos militares.
Lillian Hellman, la más sofisticada del grupo de escritores bajo discusión —a la par con Robert Penn Warren—, era una activista social y dramaturga de los años cuarenta y cincuenta. Sus memoirs contemplan la vida política y moral de estos tiempos, presentados en su obra Scoundrel Time (Tiempo de sinvergüenzas), que tiene como tema la época del macartismo durante los años cincuenta y el funcionamiento del House Un-American Activities Committee (HUAC), Comité de la Casa de Representantes sobre Actividades Anti-americanas. Su sentido de justicia y su ironía pujante se manifestaron cuando es citada para presentar testimonio de sus propias luchas sociales y para revelar los nombres de otras activistas. Se niega a hacerlo, y responde: “No voy a cortar mi tela para que corresponda a los estilos y tiempos de sinvergüenzadas.”
Se puede decir que la literatura del Sur que surgió durante estos tiempos refleja con plenitud lo que abarca este período histórico del desarrollo social, cultural, político y legal. Al considerarla, escuchamos las palabras de Franklin Delano Roosevelt, en 1944, durante el pleno auge de la Segunda Guerra Mundial, solamente unas semanas antes del Desembarco en Normandía; palabras de esperanza de hace 75 años que resuenan iguales de verdaderas hoy:
“El comercio es la sangre que da vida en una sociedad libre. Tenemos que estar atentos a que las arterias en que circula la sangre jamás estarán obstaculizadas otra vez”.
Lectura recomendada:
McCullers, Carson.
Reflejos en un ojo dorado (Reflections in a Golden Eye)
Porter, Katherine Anne. Pálida Caballo, Pálido Jinete (Pale Horse, Pale Rider)
Steinbeck, John.
Las Uvas de la Ira (The Grapes of Wrath)
Toomer, Jean.
Cane
Warren, Robert Penn.
Todos los Hombres del Rey (All the King’s Men)
Welty, Eudodra.
Una Cortina Verde (A Green Curtain)
Videos recomendados:
Las pequeñas zorras (basado en la obra dramática de Lillian Hellman).
Reflejos en un ojo dorado (basado en la novela de Carson McCullers).
Todos los hombres del rey (basado en la novela de Robert Penn Warren).
Unforgivable Blackness: the Rise and Fall of Jack Johnson.