LA UNIÓN. A los 91 años de edad, el agricultor Francisco Cruz Maldonado pasa sus días trabajando la tierra en afán de llevar el sustento a su familia, en el cantón Las Maderas del municipio de La Unión.
Conocido por sus vecinos como Don Chico, él es admirado porque no se deja vencer por la adversidad y sus dolencias. En esta época está cultivando el maíz, el cual servirá de alimento para él y su esposa Gabriela Bonilla, de 82 años.
Ellos son padres de tres hijos, quienes ahora tienen 40, 42 y 50 años respectivamente.
Cruz Maldonado es originario del municipio de Nueva Esparta y emigró a Honduras durante el conflicto armado entre Honduras y El Salvador en el 1969, narró.
En el 1982 regresó al municipio de La Unión para trabajar en cultivar maíz, maicillo, frijoles y otros oficios del campo.
Cada año cultiva ocho tareas equivalente a media hectárea de maíz, el limpia el terreno, siembra las semillas, la riega con insecticidas y abono.
“La juventud de ahora es haragana no le gusta trabajar; mientras que yo me enfermo al no estar trabajando”, opinó Cruz Maldonado.
A las 5:00 de la mañana sale de su casa y debe caminar, con ayuda de un bastón, más de 30 minutos para llegar al terreno ubicado en una hondonada. Las herramientas que carga a diario son una bomba de riego, la cuma, el sombrero.
“Dios es bueno porque aún tengo fortaleza para trabajar, a veces me duele todo el cuerpo pero tengo que hacer la lucha porque no tengo quien me ayude. Hay que rebuscarse para tener el maíz”, dijo el agricultor.