Los Warriors de Golden State lograron su cometido en la serie, “robarse” un partido en Toronto. Ocurrió el domingo, cuando, a fuerza de defensa en los minutos finales, le negaron el acceso fácil al aro a Kawhi Leonard y compañía y solo les permitieron el tiro perimetral, a donde fallaron los Raptors de Toronto.
Con el 104-109 a favor, los bicampeones de la NBA pusieron 1-1 la serie, que se traslada hoy a su casa para el tercer encuentro, transmitido por ESPN a partir de las 7 de la noche.
La gran duda para hoy es la de Klay Thompson. El jugador fue factor en el triunfo con 25 puntos, pese a que no pudo terminar el encuentro del domingo por un tirón.
“Si depende de mí, iniciaré el partido. No depende de mí. Me siento mucho mejor que el domingo. El nivel de dolor no se compara con el de entonces. Será una decisión previa al partido”, dijo, lo que hace entrever que, al menos, estará en la banca.
Los Warriors han sufrido múltiples lesiones en postemporada. Una de sus figuras, Kevin Durant, sigue en la enfermería. También estuvo ahí Andre Iguodala, quien convirtió un triple clave el domingo a falta de 5 segundos. Ha estado resentido, pero así ha vuelto a la cancha.
Mientras que DeMarcus Cousins por fin está jugando, aunque con minutos limitados. Eso sí, importante su retorno justo cuando Kevoon Looney sufrió una lesión que lo dejó fuera de lo que resta de las finales.
Toronto, que está más completo, lució fatigado en el tramo final del juego pasado. Su figura, Kawhi, lo intentó, pero se quedó corto varias veces, tanto en triples como en penetraciones. Ahora, la misión es rescatar esa ventaja de campo que les arrebató Golden State.