La cola para muchos seres vivos es indispensable porque se trata de una extremidad que en muchos casos ha ayudado a perpetuarse como especie. Por ejemplo, hay lagartos que utilizan la cola para almacenar grasa, aves para dirigirse por el aire o serpientes cascabel que la usan para ahuyentar a los depredadores.
La cola suele tener un propósito principal: mantener el equilibrio. La mayoría de los animales tienen cuatro patas, partiendo de este punto y teniendo en cuenta la forma erguida en la que camina el ser humano la extremidad es innecesaria, según publicación de Science Insider.
El cuerpo del ser humano está alineado con un centro de gravedad que pasa por la columna hasta los pies sin necesidad de una cola para contrarrestar el peso de la cabeza. De alguna forma, se puede decir que la gravedad nos empuja hacia delante.
En los seres humanos una cola sería solo una extremidad más que absorbería energía para crecer y mantenerse. Si bien es cierto que se tiene una cola en las primera cuatro semanas en el útero, esta desaparece y solo queda el coxis en la base de la columna vertebral, lo más cercano a una “cola” que queda en la anatomía humana. Además, sirve como un punto de inserción muscular.