Desde el pasado 6 de mayo el presidente electo se encuentra de gira en los Estados Unidos. Este martes participó como ponente en la edición 49 del Consejo de las Américas. En ese evento afirmó que no tiene decisión firme aún de si romper relaciones diplomáticas con China Popular y abrirlas de nuevo con Taiwán, que todo dependerá de lo que más le convenga el país, afirmó al ser entrevistado por periodistas locales.
“Seré franco. No vamos a hacer lo que sea más conveniente para los Estados Unidos o para China. Vamos a hacer lo mejor para El Salvador. Eso podría significar estar regresando con Taiwán, podría estar quedándose con China. Es una discusión en curso. No vamos a hacer algo que tenga que ver con agradar a China o a Estados Unidos, sino lo que es mejor para El Salvador… Queremos primar la inversión internacional, no por razones políticas, sino por razones que convengan económicamente a El Salvador”, expresó tajantemente Bukele.
Anteriormente, el presidente electo había adelantado que estudiará las relaciones diplomáticas que el gobierno del FMLN, presidido por Salvador Sánchez Cerén, abrieron el año pasado sin previa consulta de los actores políticos y empresariales.
La decisión fue duramente cuestionada porque el Ejecutivo ni siquiera informó a la exembajadora de Taiwán, Florencia Miao Hung, destacada en el país, que El Salvador se retiraba del pacto con Taiwán. Poco después de su retiro, la Asamblea la condecoró como “Noble Amiga de El Salvador”.
La recién nombrada canciller de la República para el nuevo gobierno, Alexandra Hill Tinoco, mencionó que acatarán la decisión que tome Bukele en cuanto al nexo que abrió el FMLN con China Popular.
“El caso de China fue una cosa tan rápida, tan oscura, de repente todo mundo se dio cuenta (…) aquí hay algo oscuro, bien oscuro, por qué no ser transparentes, por qué no comunicarle al pueblo”, informó Tinoco en entrevista de televisión de TCS días atrás.
El presidente electo también se ha referido al estatus migratorio de miles de salvadoreños que residen en los EE.UU., razón por la que afirma tratará de mantener excelentes relaciones con ese país como un “aliado” porque alberga a más de tres millones de salvadoreños que no miran en su país de origen oportunidades de crecer y desarrollarse económicamente.
“Digamos que si creamos trabajo digno para una persona, tendremos cinco personas menos que crucen la frontera en esas condiciones. Para crear empleos queremos aprovechar la tecnología y así agilizar los procesos para la formación de empresas o emprender. Podemos ser más rápidos y ahorrar el dinero que gastan en perder el tiempo en crear más empleos”, afirmó Bukele.