La organización sin fines de lucro Glasswing International realizó su Quinta Gala Benéfica Anual, en la ciudad de New York, Estados Unidos, con el objetivo de recaudar fondos para los programas que desarrolla en Centroamérica, los cuales están enfocados en la niñez y juventud.
Este año el evento logró reunir más de $1 millón, fondos que permitirán dar continuidad a los programas que brindan acceso a educación de calidad y espacios seguros para niños y jóvenes que se encuentran en situación de vulnerabilidad ante la violencia.
Más de 400 líderes empresariales, figuras sociales y representantes extranjeros asistieron a la gala, quienes fueron recibidos por los cofundadores de Glasswing, Celina de Sola, Ken Baker y Diego de Sola.
También contaron con la presencia de Carmen Busquets, empresaria de moda; John Skipper, presidente de ESPN; Jana Pasquel de Shapiro, empresaria de moda, Franck Petitgas, director de Morgan Stanley International; y Olivier Sarkozy, banquero, todos aliados de Glasswing.
“Centroamérica es una región de extrema violencia, pero también de extrema oportunidad y potencial humano. Todos los días, cientos de niños huyen de sus comunidades para escapar de niveles inimaginables de pobreza y violencia con la esperanza de un mejor futuro. Nosotros le damos esperanza a los niños y sus familias, les recordamos cuánto creemos en ellos y les proporcionamos espacios seguros y acceso a oportunidades de aprendizaje, recreación y tutoría, lo que les permite convertirse en la mejor versión de sí mismos”, dijo Celina de Sola, el jueves por la noche.
El invitado especial a la gala fue Raúl de Molina, presentador del programa de televisión El Gordo y La Flaca, de Univisión, quien pronunció un discurso en apoyo a la organización.
“En Glasswing abordamos las causas fundamentales de la pobreza y la violencia, a través de programas de educación y salud. Más de 12 años de experiencia han enseñado que estos problemas son complicados, y que brindarles a nuestros hijos apoyo emocional es tan importante como tener programas de educación de calidad”, dijo el presentador.
Agregó que los niños con los que trabaja Glasswing están constantemente expuestos a pérdidas y sufrimiento inimaginable, donde países como El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua son “desiertos de salud mental”, ciudades que carecen de apoyo necesario para curar el trauma, ya que solo hay 88 psicólogos que atienden a un promedio de 1 millón de estudiantes, en algunos de los países más peligrosos del mundo.
“Los niños no pueden aprender o soñar con su futuro si luchan por sobrevivir día a día. Sin embargo, en medio de este dolor, somos testigos del poder de la comunidad y la capacidad de recuperación”, expuso De Molina.
El presentador hizo énfasis en el trabajo que realiza la organización donde desarrollan las habilidades básicas en los niños y jóvenes, como la confianza, la curiosidad, la creatividad, el pensamiento crítico, la comunicación y la colaboración.
“Inyectamos aprendizaje e inspiración práctica a través de clubes extracurriculares que los convierten en jóvenes científicos, artistas, empresarios, ingenieros, atletas y futuros líderes, inculcándoles esperanza, propósito y una visión para el futuro. Recuperamos y revitalizamos los espacios públicos, y desarrollamos la capacidad de los maestros de escuelas públicas y los profesionales de la salud para que sirvan mejor a sus comunidades”, explicó. Durante la noche, Glasswing también rindió homenaje a John Moore y Morgan Stanley, así como a los voluntarios, quienes para la organización son agentes de cambio y ejemplo para los niños y jóvenes que participan en los programas.
Otros invitados de relevancia fueron la embajadora de los Estados Unidos en El Salvador, Jean Manes; la actriz Mary-Kate Olsen; Donna Karan, diseñadora; Nina García, editora de la revista ELLE; la actriz y modelo Calu Rivero; Flaviana Matata, modelo de origen africano; la bloguera Valeria Hinojosa; Fabiola Beracasa Beckman, productora de cine y televisión.
También asistieron la empresaria salvadoreña Ariela Suster; Mayte Allende, escritora de moda; Yaz Hernández, ejecutiva de moda; Naeem Khan, diseñador de moda; Bibhu Mohapatra, diseñador de moda; Hassan Pierre, fundador de una boutique en línea; Raúl Ávila, lingüista mexicano; y el actor Gabriel Butu-Boyle.
En la gala de Glasswing también habló René Pineda, un estudiante salvadoreño, de 14 años de edad, que está inscrito en el programa extracurricular de Glasswing llamado Club de Fútbol.
El joven habló sobre lo que ha vivido en su entorno durante su juventud, y sobre cómo uno de los voluntarios, Reymundo Carballo, a través de dicho programa de la organización, lo inspiró a superar la adversidad y nunca rendirse, razón por la que durante la gala le entregó un reconocimiento por el impacto positivo que ha tenido en su vida. “Mi vida es una muestra de lo que muchos niños y jóvenes latinoamericanos viven. Tenemos un montón de problemas, ¿pero saben qué también tenemos? Las ganas de salir adelante. Yo estoy seguro que los jóvenes como yo solo necesitamos de alguien que crea en nosotros, y que nos dé una segunda oportunidad para demostrar lo que somos capaces. Eso ha sido Glasswing para mí”, dijo el joven.