Carlos Rivas, pastor del Tabernáculo de Avivamiento Internacional (TAI), fue detenido cuando conducía en evidente estado de ebriedad durante la madrugada de este jueves. Según el reporte policial, al momento de ser arrestado, el pastor se negó a realizarse la prueba de alcotest en la zona del bulevar Constitución.
Una patrulla del Sistema de Emergencias 911 realizó la detención por el delito de conducción peligrosa. El procedimiento tuvo lugar en el pasaje Las Arboledas y bulevar Constitución, colonia Miranda, en San Salvador.
De acuerdo con las autoridades, el detenido se encontraba en evidente estado de ebriedad, cuando fue interceptado por la patrulla policial.
El detenido fue remitido a la División de Tránsito Terrestre, para ser puesto a la orden de las autoridades respectivas.

Casi un centenar de conductores en estado de ebriedad han sido detenidos en esta temporada de vacaciones en diferentes operativos policiales.
Las autoridades de la Policía propusieron en el mes de enero a los diputados de la Asamblea Legislativa elevar el costo de las multas de tráfico por alcoholemia, que actualmente rondan entre los 11 y 57 dólares, con el fin de “endurecer” las sanciones y evitar percances viales.
Las autoridades de la División de Tránsito de la PNC solicitaron que se modifique la Ley de Tránsito para que los conductores que manejan en estado de ebriedad paguen una multa de 2,000 dólares y 4,000 dólares a los que provoquen accidentes de tráfico “con consecuencias letales”.
De nuevo ante las autoridades
El pastor evangélico se vio envuelto en otra polémica en el año 2015, cuando una mujer lo denunció ante el 911 de haberla retenido por la fuerza en un motel de la urbanización Santa Elena y de agredirla cuando intentó abandonar el lugar.
La mujer contó que ella se congregaba en la iglesia de Rivas y que desde hacía año y medio mantenían una relación sentimental. El pastor Rivas hizo famosa la frase “infidelidad responsable” al abordar dicho incidente, por el que fue acusado de cuatro cargos penales. Por ese caso, el pastor evangélico no fue a prisión y recibió medidas sustitutivas.