El agente Walter Barrientos Cardona fue acribillado, este lunes, en el municipio de Ayutuxtepeque, al norte de San Salvador.Él se convirtió en la décima baja que registra la Policía Nacional Civil este año.
Barrientos, destacado en la Unidad de Mantenimiento del Orden (UMO), fue ultimado a balazos cuando circulaba en una motocicleta sobre la calle principal de la colonia Ascensión.
El crimen lo cometieron, a las 5:30 de la tarde, tres hombres que aparentemente son pandilleros de la 18 revolucionarios, informaron fuentes policiales. Tras quitarle la vida al agente le robaron su arma de equipo.
Las autoridades no lograron esclarecer qué andaba haciendo la víctima en la zona, pues no residía en la zona.
Tras el homicidio de Barrientos, la Policía no realizó el operativo de búsqueda de los delincuentes que suele hacer tras el asesinato de agentes o militares. Se conoció que las autoridades no supieron, hasta varias horas después del ataque, que la víctima era empleado de la institución.
Mientras las autoridades procesaban la escena del homicidio, dos pasajeros de un microbús de la Ruta 6A resultaron lesionados de bala en la calle a Mariona, en Mejicanos, a pocos metros de una sede policial.
El ataque presuntamente estaba dirigido al motorista de la unidad, quien salió ileso. La Policía informó que, según las cámaras de videovigilancia que hay en la zona, los pistoleros dispararon desde un vehículo rojo que fue robado el domingo en la colonia Miramonte.