Revista Mujeres y la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (Camarasal) entregaron el reconocimiento “Mujeres influyentes” a diez personas que generan influencia positiva en su entorno a través de sus proyectos.
Aída Betancourt, Celina de Sola, Cecilia Cruz Palma, Katia Chicas, Cecibel Lau, Yanira de Massana, Raquel Arana, Carmen Rengifo, Ingrid Weil e Ildiko de Tesak fueron las elegidas para recibir esta presea en el acto que se desarrolló en la terraza de Torre Quattro.
Las palabras de apertura del evento estuvieron a cargo de Fabricio Altamirano, director ejecutivo de El Diario de Hoy, quien comparó el evento con una antología. Manifestó lo importante que es “reconocer, subrayar el legado y trayectoria de estas grandes mujeres que han hecho tanto por nuestro país”.
Luego cedió el micrófono a Laura Díaz, directora de Negocios Editoriales de Altamirano Media, quien habló del poder de influir. Influyente, dijo, es una persona que es capaz de producir en otras un efecto. “Ustedes aquí representan ese poder transformador de la mujer. Si miran hacia atrás verán las huellas de su existencia en la vida de muchas personas”.
Por su parte, Javier Steiner, presidente de Camarasal, habló sobre la importancia de los roles que las mujeres representan en diferentes ámbitos de la realidad del país. Y elogió su trabajo y su poder para transformar la sociedad.
Historias de éxito y valor
Durante el evento, Ingrid Weil, empresaria pastelera de Chez André, habló sobre las claves del emprendimiento: Pasión, perseverancia, creatividad, energía, confianza, positivismo, ambición, toma de riesgos, innovación constante, comunicación efectiva y saber escuchar clientes internos y externos.
El eterno dilema del balance entre la vida familiar y profesional fue el tema que abordó Andrea de Alas, de I Bella. Expresó la importancia de amar lo que se hace y realizar la labor bien motivada.
Luego, Lorena Saca, consultora de imagen certificada, dirigió un conversatorio enfocado a perder el miedo a enfrentar cambios y lanzarse a realizar lo que uno cree. En el panel participaron Ildiko de Tesak, de la Fundación Pablo Tesak; Aída Betancourt, del movimiento político Nuestro Tiempo; y Celina de Sola, de Glasswing.
Aída Betancourt reflexionó sobre la importancia de la reacción al miedo: “Que no nos paralice, sino que nos empuje”, sentenció. Además, dijo que es importante tener mentoras que “dan el empujoncito que necesitamos” y que ayudan a creer en una misma; y que además es importante tener ejemplos de liderazgo y trabajar para crear oportunidades para los demás.
Celina de Sola resaltó la importancia de replicar y trabajar unidas. “Entre todas hay que ser la candela y el reflejo de la candela. Es un trabajo en equipo”, subrayó.
Luego de las palabras, se entregaron los reconocimientos de “Mujeres influyentes” a Aída Betancourt, Celina de Sola, Cecilia Cruz Palma, Katia Chicas, Cecibel Lau, Yanira de Massana, Raquel Arana, Carmen Rengifo, Ingrid Weil e Ildiko de Tesak.
Ildiko Tesak dio unas palabras y se refirió a la importancia de la familia para promover el desarrollo como proveedora de un hogar seguro donde los hijos aprenden valores, a ser solidarios, honestos.
“Nos hace falta acordar objetivos comunes. Querer más nuestro país. Educar. Hacer patria. Sin roces”, todo ello para promover la movilidad social: “Que los hijos tengan mejor vida que sus padres”, finalizó.
